El pontevedrés Jaime Olmedo continuará al frente del Liceo Casino cuatro años más. Se sumarán a los ocho que ya lleva presidiendo la institución. Ha revalidado su puesto en la directiva después de una segunda vuelta de las elecciones, al lograr 627 votos frente a los 527 conseguido por su rival en las urnas, el médico Alejandro Regueiro. La primera había quedado en empate técnico. El abogado asume con satisfacción este nuevo período y remarca que su intención es la ya anunciada: continuar con el proyecto iniciado hace ocho años, aunque tampoco descarta incorporar algunas de las ideas de la candidatura contraria, avalada por un buen número de socios.

-Pasadas unas horas de la victoria de su candidatura en la segunda vuelta, ¿cómo asume el resultado?

-Con satisfacción y, sobre todo, con ilusión para seguir trabajando para poder finalizar el programa con el que en su día nos presentamos. Fue un programa muy concreto, muy pormenorizado, y los socios saben perfectamente a qué nos comprometemos.

-En esta ocasión han ganado con bastante más holgura que en la primera, de empate técnico. ¿Se esperaban este resultado?

-La verdad es que no sé; supongo que los socios habrán estudiado los dos programas y habrán decidido que preferían el nuestro. Yo tenía esperanzas de ganar, pero siempre estás sujeto a la incertidumbre.

-¿Y cree que fue precisamente ese punto de partida de empate en la primera vuelta lo que llevó a un incremento en la participación?

-Yo creo que son personas muy vinculadas al Liceo Casino que quisieron elegir y que nadie los hiciese por ellos. Fueron unas 300 personas más las que votaron en la segunda vuelta.

-¿Había habido elecciones previas con una participación tan elevada?

-Creo que ha sido la mayor en los últimos doce años. Es muy satisfactorio conseguir que más del 50 por ciento de los socios votasen. Es un porcentaje que legitima a cualquiera de los dos candidatos. Esto quiere decir que los dos eran adecuados.

-¿Cuáles son las líneas generales de su programa para que lo apoyasen 627 personas?

-Entre otras cuestiones, incluimos una remodelación parcial de la sede social para optimizar las superficies y obtener más salas para desarrollar actividades que hasta la fecha no se ha podido.

-¿Cómo cuales?

-Hablamos desde una sala infantil en el sótano, una sala multimedia, una nueva sala de estudios, una nueva de bridge que va a ser extraordinaria y situada en la cuarta planta, un ascensor... En fin, obras que son necesarias en un edificio que se reconstruyó en los años 80 y que necesita adecuarse a las necesidades actuales.

-¿Y respecto a las actividades?

-Pretendemos hacer convenios con asociaciones culturales, con los Amigos do Camiño Portugués, ampliar los clubes de lectura...

-¿Figura entre esos objetivos el intentar acercar a las nuevas generaciones la institución?

-En los últimos ocho años hemos hecho muchas actividades centradas sobre todo en los niños. Se potenciarán. En cuanto a los juveniles, en la cuarta planta se creará una sala para ellos. Hablo de socios hasta los 20 años.

-¿Incorporarán o adaptarán las propuestas de la otra candidatura?, al fin y al cabo son vistas con buenos ojos, como mínimo, por los 527 socios que la eligieron.

-Por supuesto. Algunas de ellas son aprovechables. Por ejemplo, y también lo incluíamos en nuestro programa, de inmediato se acometerá la creación de una comisión para revisar los estatutos vigentes. Hay que acomodarlos a la ley actual de protección de datos, revisar nuevas categorías de socios... Una vez que abres la caja te das cuenta que hay muchas cosas que se deben reformar. Pero es algo que ocurre en todas partes.