El juzgado de Caldas de Reis en funciones de guardia está a la espera de recibir el atestado de la Guardia Civil de Tráfico sobre el accidente mortal que en la noche del pasado sábado en la AP-9, a la altura del municipio de Barro.

Así lo explicaron ayer fuentes del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, quienes también confirmaron que el conductor de 27 años investigado por este siniestro quedó en libertad en sede policial a la espera de que pueda ser requerido por el juzgado caldense. Cabe recordar que el coche que conducía este pontevedrés, N. C. M. G., colisionó contra otro vehículo en el que circulaba un matrimonio y su hijo de 12 años. Como consecuencia del siniestro resultó muerta la mujer de 52 años., R. G., que era de origen italiano pero que residía en Caldelas de Tui.

Cuando se le practicó la prueba de la alcoholemia al joven pontevedrés, este arrojó un resultado positivo de 1,02 mg/l en la primera prueba y 1,01 mg/l en la segunda, es decir, cuatro veces más que la tasa mínima permitida de 0,25.

A la espera de lo que determine el juzgado, la Guardia Civil lo investiga inicialmente como autor de un delito de homicidio por imprudencia grave y otro contra la seguridad vial por conducción alcohólica.

Según indicaron desde el Instituto Armado, también se procedió a la intervención del vehículo como del permiso de conducir del supuesto causante del siniestro mortal.