La Escuela Agility Pontevedra, apoyada por la Federación de Caza, montó en la Alameda de Pontevedra un circuito de actividades para perros, que permitió a las mascotas demostrar todo lo aprendido. Carlos Souto, entrenador del club, animó al numeroso público que se congregó para disfrutar de las destrezas de los perros a sumar a sus mascotas a esta práctica deportiva y especialmente a aquellos que viven en pisos.

Según explicó se trata de una disciplina que enseña a los perros a obedecer las órdenes de sus guías, personas que pueden ser de cualquier edad. "Tienen que ir superando obstáculos y eso requiere de mucho entrenamiento, lo que deriva en un cansancio físico en los animales que favorece la convivencia en los pisos".

Aunque al principio a las mascotas les cuesta obedecer, en el primer mes de entrenamientos ya pueden apreciarse los primeros avances.