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Vilma Vaquerano: "En el primer trimestre de 2016 los feminicidios en El Salvador aumentaron un 140%"

"El 32% de los embarazos que se dan en el país son de niñas y adolescentes"

La activista por la paz Vilma Vaquerano. // FdV

Las jornadas Des/Igualdade Global se despiden hoy en el Pazo con una intensa jornada de mesas redondas, debates y talleres que arrancarán con la conferencia de Vilma Vaquerano sobre "Mujer y violencia. La lucha de las organizaciones de mujeres en el Sur".

-¿Cómo es en general la situación de la mujer salvadoreña?

-Bastante complicada debido a toda una serie de factores, la misma cuestión cultural propia del patriarcado, el sistema sumamente sexista con un machismo bastante arraigado en una sociedad ultraconservadora, entonces es bastante complicado. Y a todo ello se suma la actual coyuntura de violencia de las pandillas, que repercute directamente en las mujeres en forma de violencia de pareja, sexual.

-Ormusa, la organización a la que usted pertenece, monitorea los casos de violencia contra mujeres ¿aumentan?

-Si, hemos venido monitoreando y vemos un aumento importante, en el tema de feminicidios solamente en el primer trimestre de 2016 los feminicidios en El Salvador aumentaron un 140% en relación a 2015, que ya por si fue un año de bastante violencia contra las mujeres con respecto a los últimos 2 años. En 2011 se produjo el pico más alto desde la firma de los acuerdos de paz y ahora nos encontramos con este tema de las pandillas que se suma a un escenario habitual en el que se naturaliza la violencia, las mujeres realmente no asumen que son víctimas, en el que impera también una debilidad institucional y un cumplimiento parcial de las leyes logradas por el movimiento de mujeres con el apoyo de la cooperación internacional.

-¿Qué son las maras?

-Grupos criminales formados fundamentalmente por hombres, hay una participación bastante alta de niños y adolescentes, utilizados por el crimen organizado, algunas veces externo al Salvador y otras veces propio, que viven en permanente enfrentamiento contra las autoridades policiales y ahora contra el ejército. De paso toman como rehén a la población, a las mujeres haciéndolas víctimas de violencia sexual, sobre todos niñas y adolescentes están siendo esclavizadas por las pandillas, que mantienen el asedio contra la población a través de las extorsiones, les exigen sumas de dinero en función del tipo de negocio o si recibe remesas de Estados Unidos a cambio de no matarlas.

-¿Cómo inciden en el trabajo de organizaciones como a la que usted pertenece?

-Ha significado una restricción al libre tránsito, hay zonas del país en las que las organizaciones de mujeres no pueden asistir o se nos complica la ejecución de actividades de empoderamiento. Realmente es un escenario bastante desesperanzador, lógicamente el movimiento feminista que de alguna manera estamos acostumbradas a luchar contra estos ambientes hostiles seguimos motivadas para continuar aportando nuestro trabajo pero si que es un contexto bastante negativo aunque siempre está la esperanza de ver la luz al final del camino.

-¿El de las maras es un fenómeno reciente?

-Lo es, principalmente tras la finalización del conflicto que afectó a El Salvador y que terminó con la firma de los acuerdos de paz en 1992.

-¿Cómo se originaron?

-Su origen está en las muchas deportaciones de salvadoreños que estaban vinculados a hechos criminales en Los Ángeles y otras ciudades de Estados Unidos ya que El Salvador es un país de mucha emigración hacia Estados Unidos. Comenzaron a deportar a delincuentes, no hubo una política pública que realmente atendiera a esas personas y estos delincuentes comenzaron a reclutar a jóvenes adolescentes. También influyó que eran niños y niñas que estaban siendo criados por abuelas con muy poca autoridad, y el mismo sistema con pocas oportunidades educativas y escasísimas oportunidades laborales, lo que fue fomentando grupos de población en total exclusión. Pero realmente es una problemática que comenzó a surgir alrededor de 2002 y creció en la siguiente década, tuvo su pico en 2009 y en los últimos 2 años se ha incrementado la violencia también un poco en respuesta de las pandillas a las acciones gubernamentales de represión, algunas veces de delincuentes y otras ante la simple sospecha de serlo, todo ello genera un clima bastante hostil a los derechos humanos, de estigmatización de niños y adolescentes, pero es importante que las personas conozcan este origen en relación a personas vinculadas a hechos delictivos en Estados Unidos.

-¿Está legalizado en El Salvador el aborto?

-No, no hay esa posibilidad.

-¿Ni siquiera en casos de violación, aborto terapéutico etc?

-No, la ley fue reformada, antes se establecieron tres causas, las más comunes como violación o aborto terapéutico, y ahora no hay ninguna posibilidad. El movimiento de mujeres ha tenido una lucha bastante fuerte con casos emblemáticos de mujeres víctimas de violencia sexual o que no había posibilidad de que el feto tuviese vida después del parto. Tal vez aquí se haya escuchado el caso de Beatriz, enferma de lupus, con un feto sin cerebro, pues ni siquiera en ese caso fue permitida la interrupción del embarazo a pesar de los costes en la salud que eso iba a conllevar para ella. No está permitido en ningún caso y es algo sumamente grave en un escenario de violencia sexual y en un ambiente de altas tasas de embarazo en adolescentes.

-¿Hasta dónde llegan esas tasas de embarazos adolescentes?

-El 32% del 100% de los casos de embarazos que se dan en el país son de niñas y adolescentes menores de 18 años. Tenemos al menos de 5 a 6 casos de denuncias de violencia sexual, el 80% del total de casos de denuncias por violencia sexual también son contra niñas y adolescentes.

-¿Hay planificación familiar o educación sexual?

-Hay poco acceso, diría que nulo más bien, a la educación sexual integral en una sociedad sumamente conservadora que todavía cree en que las personas están obligadas a tener los hijos que dios les mande y un paradigma de mujer contra el que luchamos desde el movimiento feminista sumamente asociado al ejercicio de la maternidad. Entonces hay una serie de elementos que agravan ese nulo acceso al derecho a decidir de las mujeres, pero nosotros desde el movimiento de mujeres continuamos luchando porque necesitamos que el tema lo conozca la ciudadanía, porque muchas veces ni las personas conocen las leyes que tenemos, así que la lucha está dirigida a eso, al menos a poner en la agenda pública, en la agenda de los medios, que El Salvador es uno de los 7 países de Latinoamérica y uno de los 9 del mundo en el que no está permitida en ninguna situación la interrupción del embarazo.

-¿Ayuda mucho en este escenario la cooperación española?

-Es importantísima, en concreto la cooperación del País Vasco, para nuestro país, sobre todo en este contexto en el que ya mucha cooperación internacional se ha retirado de El Salvador.

-¿Por qué han retirado la ayuda?

-Debido a que ha sido clasificado como un país de renta media por fines partidistas de un ex presidente, Elías Antonio Saca, por fines propagandísticos del gobierno, además de por la crisis internacional, de modo que es importantísimo que la sociedad española sepa que la sociedad salvadoreña está enormemente agradecida con la cooperación española, todos los avances sin excepción que se han logrado en la sociedad han sido empujados por el movimiento de mujeres, lo que no hubiera sido posible sin la cooperación internacional, sin los fondos españoles, de hecho si estoy aquí es por un apoyo directo de la Asamblea de Cooperación por la Paz.

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