El traslado de David Oubel se completó finalmente ayer en el segundo intento, después de que este miércoles el primero se frustrase a la altura de Puebla de Sanabria (Zamora) al ordenarse el regreso del parricida para someterse a una prueba en Caldas que ya estaba prevista con anterioridad. La cancelación del trayecto se había producido unas tres horas después de que el autobús regular con otros presos hubiera salido de A Lama a las nueve de la mañana.

La descoordinación entre juzgado y e Instituciones Penitenciarias motivó el rocambolesco traslado que quedó a medio camino. El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia responsabilizaba ayer en una nota a Prisiones y en ella explicaba que "el juzgado no autorizó ningún traslado, ya que estas decisiones son competencia exclusiva de Instituciones Penitenciarias". En cambio, a continuación, sí admite implícitamente parte de responsabilidad en la falta de entendimiento que provocó el citado traslado al afirmar que "Instituciones Penitenciarias lo pone en conocimiento del juzgado, pero no solicita la autorización", agregaba la nota, reconociendo así que el juzgado sí conocía la medida.

Por su parte, desde Instituciones Penitenciarias prefirieron no valorar el controvertido trayecto. Sus responsables de prensa se limitaban a un "nada que decir" al ser preguntados por lo ocurrido.