La Axencia de Protección da Legalidade Urbanística (APLU) acaba de llevar a cabo su primera demolición de este año en Vilaboa. Se trata de una vivienda unifamiliar emplazada en suelo rústico de protección ordinaria y sobre la que pesaba una infracción urbanística muy grave.

La medida llega poco después de que la misma Axencia decretara el derribo total de una vivienda ilegal ubicada en Borrateiros, en Figueirido. Se ordena a los propietarios "la demolición de las obras de construcción de una vivienda unifamiliar de madera de planta baja, con terrazas delante de la puerta de entrada". También se decreta la "reposición de los terrenos afectados al estado anterior al inicio de las obras, así como el cese de los usos a los que diese lugar" la casa.

Vilaboa es un municipio amenazado por varias de estas actuaciones debido a las afecciones de la Ley de Costas, si bien estos dos casos son ajenos a ese conflicto.