El socialista Agustín Fernández y el nacionalista César Mosquera fueron los encargados de responder a Moreira, que fue acusado de intentar "cubrir su incapacidad para hacer política", de no saber "lo que quiere" , falta de liderazgo y de intentar "agradar a sus superiores en la Diputación y en Santiago"

Ambos insistieron en la oferta de diálogo, en reiterar su pretensión de negociar un nuevo acuerdo y en que "estos temas deben solucionarse" mediante el debate y no recurriendo a la vía judicial.

Mosquera aseguró que a Moreira le faltan "muchos hervores para actuar políticamente", de enredarse "en cuestiones menores" y carecer de "altura de miras". Millones de parados, desahuciados, estafados por las preferentes, "una sanidad vendida y una educación desatendida, una Ley de Costas pretendiendo beneficiar a Ence"... Son temas que citó el grupo de gobierno antes de reconocer que "no estamos para perder el tiempo con estas cosas".