Pulsan el portero automático de un edificio y, si les abren la puerta, despliegan una operación que dura minutos. Uno de los asaltantes se queda vigilando y el otro va llamando a pisos al azar. Si nadie abre en esa vivienda, fuerzan la puerta con métodos a veces insólitos, como la introducción de un alambre desde la mirilla hasta el pestillo interior, y se llevan en tiempo récord dinero o joyas. Así fue alguno de los robos a pisos perpetrados hace unos días en la ciudad.

Se trata de dos o tres personas que trabajan de forma itinerante "y cada vez más especializadas", indican fuentes policiales, para ese tipo de robos rápidos. El verano, con muchos edificios casi vacíos es una estación ideal para operar.

Por este motivo, la Policía Nacional aún cuando no hay un operativo especial de vigilancia, dado que no hay repunte de robos respecto a los del pasado verano, está extremando las rutinarias labores de control y centrándose en estación de autobuses y tren, calles y carretera, "controlando la llegada de gente visitante", indican fuentes de la Comisaría de Ourense y haciendo labores de información en pozas termales u hoteles.

Explican las mismas fuentes que "la vigilancia y el control es el de siempre, pero se extrema en estaciones de bus, tren y carretera controlando la llegada de esos visitante y se ha hecho campaña de información en hoteles, viviendas vacacionales, termas, o en firmas de alquiler de vehículos ya a inicios de verano".

También se han realizado antes de la entrada de la etapa estival, charlas informativas a asociaciones de vecinos, y en general a personas mayores, las más vulnerables.

Según un portavoz de la Comisaría de Ourense los consejos que están dando son los generales para todas el país "que los visitantes tengan cuidado sobre sus pertenencias, maletas, documentación, tarjeta de puerta, control de hospederías en cuanto a quien se alquila la gente que va de viaje que deje a alguien que vacíe buzón y que no publiquen fotos en las redes de su estancia fuera·"

Los dos robos más recientes en edificios se produjeron la semana pasada en inmuebles de Camiño Caneiro y en Rúa Nova. Por eso los vecinos de la zona son más precavidos a la hora de abrir las puertas del portal a desconocidos

En el edificio de Rúa Nova los ladrones entraron en tres pisos, no todos los propietarios estaban de vacaciones, simplemente no estaban en casa en ese momento. Aunque un vecino oiga ruido en la puerta de al lado no siempre sospecha al ser esos robos en horario diurno.