Un joven de 27 años fue juzgado ayer por un presunto delito de coacciones a su pareja, hasta el punto de supuestamente dejarla encerrada con llave en casa, con su hija menor en común. La víctima tuvo que llamar al 112 para poder salir del domicilio. El joveno no reconoce el delito y no aceptó la petición de condena.

El fiscal solicita 70 días de trabajos en beneficio de la comunidad -una pena superior a los 40 días que pedía inicialmente-, así como 2 años de privación del derecho a la tenencia o porte de armas y el mismo periodo de alejamiento e incomunicación con respecto a la víctima, a al menos 200 metros.

Según el fiscal, tras mantener una discusión con su pareja en el domicilio familiar, en la ciudad, la mañana del 9 de mayo de 2018, presuntamente se fue y cerró con llave la vivienda, dejando a la víctima y a la hija de ambos dentro. La mujer tuvo que recurrir al 112. Llegaron la Policía y los bomberos, que forzaron la cerradura para abrir la puerta.