El presidente del Gobierno gallego, Alberto Núñez Feijóo, acudió ayer a la inauguración de las nuevas instalaciones de la Casa Consistorial de Toén, que consta de dos plantas y el doble de superficie que el antiguo consistorio. Un acto que aprovechó para reivindicar la política útil que busca soluciones a los problemas y "que paga lo que se debe". Una política que aseguró inspira la acción del Gobierno que preside.
Feijóo visitó ayer las nuevas instalaciones públicas y destacó esta obra como un ejemplo de colaboración entre administraciones, que hizo posible rehabilitar y ampliar el edificio, haciéndolo más confortable y accesible para los trabajadores y los vecinos, y mejor preparado para prestar un buen servicio.
Dice es "un nuevo edificio que pasa a formar parte del patrimonio del concello y de sus vecinos".
Las obras se iniciaron ya en el año 2016 con una primera fase de 150.000 euros a la que siguió la segunda por 450.000 aproximadamente, y fue necesario derribar el viejo inmueble y el colindante del centro de salud para levantar un único edificio.