Las últimas estadísticas del Ministerio del Interior, la medida oficial del estado de la seguridad ciudadana, constatan un aumento de la delincuencia si se toma como referencia el número de hechos conocidos por las fuerzas de seguridad, teniendo en cuenta que una parte de las infracciones no se descubren. El total de infracciones registradas entre enero y finales de septiembre en la provincia fue de 5.731, lo que supone una media diaria de 21 y un 7,7% más que los casos descubiertos en el mismo periodo del año anterior (5.320). Entre las figuras delictivas al alza destaca la subida de delitos sexuales conocidos, 56 en los tres primeros trimestres -5 de ellas, agresiones sexuales con penetración-, un promedio de 6 cada mes. La subida de estos sucesos según el registro policial es del 40%.

El incremento de las infracciones es porcentualmente mayor en el municipio de Ourense. En la ciudad se concentra un tercio de la población de la provincia. La prevención e investigación de delitos corresponde, fundamentalmente, a la Policía Nacional. Entre enero y septiembre de este año, Interior contabiliza 2.807 hechos conocidos, un 14,3% más que los 2.455 del mismo periodo de 2017.

La estadística oficial es menos complaciente que el discurso de las autoridades locales, con su alusión constante a que Ourense -con cada vez menos población- es un territorio sin problemas de criminalidad. Pese al incremento de infracciones registrado en el último periodo, la junta de seguridad local celebrada el miércoles en la Subdelegación transmitió a los medios que "en el balance de 2018 no hubo datos significativos respecto de otros años, determinando Ourense como una ciudad segura".

En la ciudad están sin resolver el asesinato de Socorro Pérez, cometido en mayo de 2015. Pese a que hubo dos detenciones tampoco se ha resuelto el crimen del párroco de Vilanova dos Infantes, Adolfo Enríquez, ligado al robo de la Virxe do Cristal, en marzo de 2015. Ambas causas permanecen archivadas provisionalmente a nivel judicial.

El último balance de criminalidad presenta una mejora estadística en el número de robos con violencia o intimidación descubiertos por las autoridades. Hubo 74 casos en toda la provincia entre enero y septiembre, un -12,9% que en el mismo periodo de 2017. Del total, 48 se cometieron en la ciudad, un 21,3% menos que el año pasado. Los robos con fuerza aumentan (678 en la provincia, casi un 2% más), mientras que los delitos más habituales, los hurtos, cayeron un 12%, con 1.260 en total, 807 cometidos en la ciudad.