La vendimia de este año en las cinco denominaciones de origen de Galicia, Monterrei, Rías Baixas, Ribeira Sacra, Ribeiro y Valdeorras, puede calificarse ya a estas alturas como excelente, de acuerdo con las previsiones de los propios consellos reguladores, tanto desde el punto de vista de la cantidad como de la calidad.

Un informe elaborado por la Consellería do Medio Rural e do Mar revela un incremento del 20,85 por ciento en la cantidad total de uva recogida con respecto a la vendimia de 2014, por lo que para este año la previsión de la cosecha es de 63 millones de quilos de uva, frente a los 49,8 millones de la campaña de 2014.

Por denominaciones de origen, el mayor incremento previsto con relación al año pasado se registra en las Rías Baixas, con un 27,82 por ciento, siguiendo por detrás la D.O. Monterrei, con un 19,4 de aumento, y muy cerca de esta cifra está O Ribeiro, con un incremento del 19,3.

Y es que la positiva evolución registrada en relación con la última temporada viene a confirmar la tendencia de los últimos diez años. Así, de hacerse efectivas las previsiones, la vendimia de 2015 será la segunda mejor del período, solo superada por la de 2006, en la que se recogieron algo más de 64 millones de quilos en las denominaciones de origen de Galicia.

En los últimos 10 años las cifran fueron de 64.024.521 kilos en 2016, 41.417.808 en 2007, 40.688.762 en 2008, 47.400.321 en 2009, 57.710.898 en 2010, 77.897.267 en el año 2011, 44.203.063 en 2012, 57.784.603 en 2013, 49.863.480 el año pasado y para 2015 se estima en 63.000.000 kilos.

Adelanto de la vendimia

Este año la mayoría de comarcas comenzaron la vendimiar en la última semana de agosto, una semana antes respecto a anteriores campañas. En Ribeiro, Rías Baixas y Ribeira Sacra estiman finalizar en la primera semana de octubre, mientras que en Monterrei y Valdeorras a mediados o finales de septiembre.

Situaciones positivas

Las temperaturas fueron en general superiores a otras campañas, provocando la rápida maduración y las importantes oscilaciones térmicas entre el día y la noche favorecieron la síntesis de compuestos aromáticos, aportando complejidad e intensidad, a la vez que se conserva el frescor. La falta de precipitaciones durante el ciclo de la vid favoreció un excelente estado fitosanitario de la uva, con lo que diminuyó la cantidad de tratamientos necesarios.

Como hechos a destacar está que en la Ribeira Sacra el buen estado sanitario de la uva no se debe solo a las buenas condiciones climatológicas, sino también al trabajo de los viticultores que cada vez más hacen la poda en verde y mantienen las vides con la carga adecuada. En O Ribeiro este año el Órgano de Control y Certificación de la D.O. dispone de una aplicación informática de alta movilidad, que permite máxima garantía en la trazabilidad y control de calidad.

Medios técnicos movilizados

Por último, cabe destacar que para controlar esta campaña de vendimia se movilizaron por parte de las distintas denominaciones de origen de la comunidad autónoma y de la Consellería do Medio Rural e do Mar más de un centenar de técnicos, entre personal fijo y eventual.