La venta de patrimonio municipal de suelo, adquirido mediante aprovechamientos urbanísticos, permitirá al Concello de Ourense destinar 500.000 euros a las obras previas del futuro Parque Botánico que está previsto construirse en la zona del Montealegre, en la parte alta del barrio de San Francisco.

Así, en 2009 se procederá a realizar las obras de explanación, movimiento de tierras y cierre del área donde se ubicará el parque, que según anunció en su momento el concejal de Medio Ambiente, Demetrio Espinosa, será único en Galicia, dentro de lo que son sus características.

Se trata de uno de los proyectos "más ambiciosos" que en el ámbito medioambiental tiene el gobierno municipal, y que además de permitir la recuperación de un espacio natural se convertirá en un enclave de disfrute y ocio para los ourensanos.

Los terrenos, vendidos a la Xunta y que permiten al Concello contar con 500.000 euros, serán destinados a construir más de 60 viviendas protegidas de promoción pública, y dos de ellas pasarán al patrimonio municipal y que el gobierno local dedicará a políticas de la Mujer.

Las cuatro parcelas, situadas en los barrios de A Sainza e Barrocás, suman una edificabilidad total de aproximadamente 4.000 metros cuadrados construibles que permitirán edificar las cerca de 60 viviendas protegidas de promoción pública, que saldrán al mercado a un precio que rondará los 90.000 euros (90 metros cuadrados)

Fondo Estatal de Inversión

También dentro de las actuaciones medioambientales, el Concello de Ourense agilizará la construcción de una gran parque público en la margen del río Barbaña, en la calle Avilés de Taramancos con la inclusión del proyecto dentro del Fondo Estatal de Inversión Municipal.

La Junta de Gobierno local aprobó, en su última reunión, la presentación del proyecto elaborado por la Concejalía de Medio Ambiente, a la convocatoria de los fondos de inversión realizada por el Gobierno central, correspondiendo al concello de la capital más de 19 millones de euros.

La actuación se desarrollará en la margen del Barbaña en el tramo comprendido entre las calles Ervedelo y Pardo de Cela, con una superficie de 5.000 metros cuadrados.

En la memoria se concibe el nuevo parque como un "punto de encuentro intergeneracional", en el que se compatibiliza el paseo y el disfrute de la naturaleza con espacios de juegos para los niños, dentro de lo que es la trama urbana.