X.M. del Caño / OURENSE

El BNG propone que Ourense sea declarada por el Parlamento ciudad termal de Galicia, como impulso definitivo para que se pueda desarrollar la red de explotaciones hoteleras e instalaciones que se están proyectando en la actualidad, con el apoyo de fondos de la administración gallega, central y de la Unión Europea. Los nacionalistas confían en que PSOE y PP apoyen la iniciativa, que se debatirá el día 13 o 14 de mayo, teniendo en cuenta que Ourense "es la segunda ciudad europea en potencial termal". Cuenta con más de sesenta manantiales catalogados, que producen cuatro millones de litros al día, cantidad que se puede duplicar en poco tiempo, mediente el estudio de algunas surgencias nuevas.

La vicepresidenta del Parlamento, Tereixa Paz Franco, y el teniente de alcalde, Alexandre Sánchez Vidal, coinciden en señalar otras ventajas comparativas que ofrece la ciudad de Ourense, frente a otras zonas termales, que son la presencia del Parque Tecnológico de Galicia y la vinculación que el Campus de Ourense tiene con el ámbito del termalismo.

Aplicación práctica

Tereixa Paz explica que el objetivo final de la proposición no de ley es que el Parlamento "haga una declaración expresa de su apoyo a Ourense, como capital termal de Galicia, y que este apoyo sea extensible al conjunto del Gobierno gallego, para facilitar las inversiones que sean necesarias para que la iniciativa tenga una aplicación práctica", además de instar, de forma conjunta con el Concello de Ourense, a la Administración del Estado, "fundamentalmente para conseguir recursos procedentes de fondos europeos".

Sánchez Vidal considera que la declaración de Ourense como ciudad termal de Galicia va aportar alicientes para atraer la inversión privada y una estabilidad para el futuro. "Las empresas privadas que en estos momentos quieren invertir en Ourense, van ver reforzadas sus expectativas, mediante una declaración que sitúa al termalismo de Ourense como clave del desarrollo, dentro del ámbito gallego", afirma.

El teniente de alcalde señala que la declaración también va aportar un refuerzo de la incorporación de nuevos segmentos de investigación y desarrollo, relacionados con el agua y con el mundo de la salud a Ourense.

Sánchez Vidal resalta que el Concello de Ourense ha presentado ante las instituciones europeas cuatro programas, todos ellos relacionados con el termalismo, que en el caso de que se aprueben significarán una inversión de veinte millones de euros, en los próximos cuatro años. Y considera que la declaración de Ourense como ciudad termal de Galicia "puede favorecer este tipo de proyectos".

Reequilibrio

El teniente de alcalde revela que existen iniciativas en marcha, tramitadas ante la Consellería de Industria, en distintas direcciones generales, como Minas, Comercio y Turismo, "donde habrá un reconocimiento específico a la ciudad de Ourense como foco termal, debido a que hay una diferencia entre esta ciudad y el resto de los demás establecimientos termales del país, que por lo general están ubicados en el medio rural y cuentan con una capacidad de agua más reducida".

Teniendo en cuenta estas circunstancias, Sánchez Vidal afirma que Ourense "debe ser el núcleo vertebrador de una oferta de salud y bienestar y de turismo para todo el conjunto de la nación gallega".

La vicepresidenta del Parlamento indica que el BNG no reclama la capitalidad termal para Ourense por un motivo localista, sino por la apuesta que hace el grupo nacionalista "por poner en marcha iniciativas tendentes a romper con la Galicia de dos velocidades", del interior, frente a la costa. Por lo que contempla la medida como un mecanismo para el reequilibrio territorial. Pero además, también resalta que ha influido en la decisión, las actuaciones que impulsa el Concello de Ourense, en materia de desarrollo termal.