Protección Civil de Cangas pone fin a los trabajos de desinfección que llevó a cabo en la zona rural del municipio.
Desde el pasado día 25 de marzo, el persona del Servicio Municipal de Protección Civil asumió la desinfección de lugares de pública concurrencia y que estaban abiertos al público dentro del decreto de alarma. Las mencionadas tareas consistieron en la desinfección de espacios públicos, donde se podía encontrar personas para acceder a las tiendas, supermercados, panaderías, agrarias, pescaderías, entidades bancarias, gasolineras o farmacias, entre otros. Además de actuar en estos espacios, también se intervino en zonas sensibles, como el Centro de Salud de Aldán, el Centro de Benestar Social, la UAD, la estación de autobuses, la estación de transporte de ría y en los pantalanes de embarque, así como en las lonjas de Aldán y Cangas, Cáritas y Comedor Social.
Los efectivos de Protección Civil trabajaron en coordinación con los equipos de limpieza viaria municipal, que se encargaban también de un cometido idéntico en la mayor parte de casco urbano. De esta manera, Protección Civil centró su actuación en las zonas rurales. Por la mañana trabajaban en las parroquias de Cangas, Coiro y Darbo y el turno de tarde lo dejaban para las parroquias de Aldán y O Hío.
Se organizaron dos equipos diarios de dos personas cada no, que desplazaban a la zona de actuación una bomba forestal pesada, que dispone de capacidad para 3.000 litros de capacidad. En el tanque se mezclaba agua y una solución desinfectante y virucida para sí pulverizar sobre las superficies donde se concentra la mayor cantidad de personas y así minimizar el posible contagio. La medida de solución empleada fue de 3.500 litros diarios.
La decisión de poner punto y final a este servicio tiene que ver con la nueva situación, donde se permite la circulación de personas y apertura del comercio. A partir del próximo lunes estas labores quedan suspendidas por la imposibilidad de llegar a todos los sitios que retoman la actividad, "por lo que pedimos la colaboración de comerciantes y ciudadanos para que no descuiden las medidas de seguridad.
