También llovío el Jueves Santo de hace un año en Cangas. La tromba estuvo a punto de impedir que la procesión de la Santa Cena, a la ocho de la tarde, pudiera acabar pero consiguió llegar hasta el final con las imágenes protegidas, por momentos, bajo la estación marítima mientras no cesaba el aguacero y escoltadas por cientos de fieles. Nadie se podía imaginar lo que iba a pasar un año después. Ayer fue Jueves Santo y las calles de Cangas estaban vacías, como desde hace casi un mes desde el confinamiento, por ese tiempo que ahora lo marca la pandemia del Covid-19, y que llueva o haga sol, obliga a no salir de casa.
No hubo profecías de este Covi-d-19 y ya lo decía el presidente de la Coordinadora de Semana Santa de Cangas, Manuel Gil, que él se podría imaginar una Semana Santa sin procesiones por la lluvia, pero no por una pandemia como la de este coronavirus.
"Ahora, nuestra máxima ilusión es poder salir en la procesión del Cristo en el mes de agosto; la Semana Santa ya la damos por perdida", asegura Adela Fariña, secretaria de la Asociación del Santísimo Cristo del Consuelo, una hermandad que tiene un tercio de 25 capuchones y 55 niños procesionando. A los más pequeños se dedicó la tarde de ayer en homenaje a la procesión de la Santa Cena que no pudo salir y por la que preguntaban los más pequeños. El menor de todos los que procesiona, que el año pasado salió con 3 años y que ahora cumplió 4, preguntaba por qué no se podía ir a la calle si no había gente. "Hay que consolarlos porque para ellos, es lo peor que les puede pasar; no lo entienden y nos toca a los adultos explicarles y animarles".
La directiva de la Asociación grabó para todos ellos un vídeo con imágenes de los niños y adolescentes en la procesión del año pasado que distribuyeron a través del WhatsApp que tienen las familias del Cristo del Consuelo.
La tarde desapacible, con bastante lluvia, impidió que muchas de las cofradías que querían sacar a los balcones y ventanas elementos de sus imágenes o de sus vestimentas pra no dejar pasar de largo el Jueves Santo , como sus capas o y el fachón que portan para iluminar, no pudieron hacerlo. Carlos Hermelo, presidente de la Cofradía de la Misericordia y Gremio de Mareantes, que fue la primera en organizar procesiones en Cangas, mucho antes de que se formara la Coordinadora de Semana Santa, asegura que esta pandemia le coincidó a él en un momento bajo de salud, por lo que no sale nada de casa. Sí que quiso colgar las capas de oro viejo de esta hermandad con su escudo, pero la lluvia lo impidió, aunque a las ocho de la tarde salió al exterior para el aplauso dirio a sanitarios. A esa misma hora tendrían que estar saliendo por la puerta de la excolegiata todos los pasos de la procesión de la Santa Cena: la mesa de los Apóstoles, que es de La Misericordia; el Huerto de los Olivos, de la Asociación del Cristo y las dos imágenes de la Hermandad de los Dolores: la Virgen de los Dolores y la Soledad.
Este confinamiento ha obligado a las cofradías religiosas a vivir una Semana Santa más personal, recogida en las casas, y conectados a través de las redes sociales. Hay hermandades que suben todos los días a su página de Facebook comentarios e imágenes. Modesto Fernández se encarga de hacerlo para la Hermandad del Cristo Resucitado que ayer colgaba fotografías del lavapiés del año pasado en la excolegiata de Cangas y los decretos del tiempo de Covid-19 con las indicaciones de los obispos para este Jueves Santo y los demás días de Semana Santa: "Omitir el lavatorio de los pies, que ya es facultativo. Omitir la procesión al final de la misa en la Cena del Señor. Reservar el Santísimo Sacramento en el sagrario y en este día se concede excepcionalmente a los presbíteros la facultad de celebrar la misa, sin la presencia del pueblo, en el lugar adecuado".
En la parroquia de Coiro, el vicrepsidente de la Hermandad del Cristo Resucitado, y su mujer, que es la secretaria, y que se encargan de guardar los capuchones de esta cofradía, los lucieron dentro de su casa para FARO DE VIGO y en honor a un Jueves Santo al que lograron dar cierto color, el celeste que les identifica entre todos los capuchones de las cinco cofradías de Cangas.
Casi todos los comentarios de los fieles en los Facebook de las hermandades son de contenido religioso como los vertidos en la Hermandad de los Dolores: " Las muestras de amor a la Santísima Virgen de los Dolores llegan de diferentes maneras, como este poema que una devota le ha dedicado a Nuestra Madre.
¡¡¡¡¡ A la Virgen de los Dolores ¡¡¡". Pero también hay espacio para vídeos y canciones como la que ofrece el Cristo Resucitado con el tema de Roberto Carlos "Yo solo quiero un millón de amigos" y la frase "A mal tiempo, buena cara".
Hoy Viernes Santo, la calle Real tendría que volver a estar repleta de procesiones, cuatro en total. A las siete de la mañana saldría la de San Pedro para los jóvenes; a las 10:30 el Santo Encuentro; a las 20:00 horas, la del Santo Entierro, la más numerosa; y a las 00:00 la del Silencio, con los dos Cristos, del Consuelo y de la Pila.
