La propiedad de la antigua casa de Matilde Bares en Bueu se inclina por su derribo debido al avanzado estado de abandono del inmueble, que se halla en la céntrica calle Eduardo Vincenti. Así se desprende del informe técnico presentado por los representantes de los propietarios, que advierten del elevado coste de afrontar una intervención de saneado, refuerzo y sustitución de elementos de la fachada y que en todo caso esa actuación "no frenará el envejecimiento del edificio".

El Concello de Bueu inició una orden de ejecución, un procedimiento en el que se insta a los propietarios a adoptar las medidas para evitar riesgos o peligros sobre la vía pública. En primera instancia se optó por vallar la fachada y a continuación se encargó un informe técnico, que advierte del mal estado de conservación de la viviendo. Su situación se agravó porque los desperfectos que se fueron registrando con el paso del tiempo no se repararon y han acabado ocasionando daños mucho más graves.

Desde la Concellería de Urbanismo de Bueu admiten "que no hay nada que legalmente impida a los propietarios proceder al derribo" de la edificación. La casa no está catalogada en el Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) ni cuenta con ningún tipo de protección. "Lo único que tienen que hacer es presentar un proyecto de demolición", reconoce el concejal, Martín Villanueva.

La corporación debatió esta misma semana una moción presentada por el PSOE en la que se instaba al Concello de Bueu a comprar el inmueble para proceder a su rehabilitación y destinarlo servicios municipales. La propuesta fue rechazada en una votación que se decidió con el voto de calidad del alcalde, Félix Juncal, que ayer justificaba esa negativa. "Es un elemento que en el PXOM no cuenta con ningún tipo de protección ni figura como reserva dotacional. No tiene un valor patrimonial, más allá de su valor simbólico", argumenta Juncal. Desde el ejecutivo local añaden que "tenemos constancia de que había personas interesadas en adquirir el inmueble, pero por distintas razones no se encuentra en el mercado o en disposición de ser vendido".

El alcalde temen que una posible adquisición de esta vivienda, que data del año 1905, acabe convirtiéndose "en un negocio ruinoso" y cita como ejemplo lo ocurrido en su día con la donación del barco "J.Vidal". En este sentido Félix Juncal acusa al portavoz municipal del PSOE, José Manuel Vilas, de falta de coherencia. "Descalificó obras que suponían una mejora de dotaciones y de servicios, como la piscina o la carpintería de ribera, a las que se refería como actuaciones faraónicas. Esta que propone ahora sí que se podría considerar como una obra faraónica", reprocha el regidor municipal.