La ejecución de la tercera y ultima fase del paseo marítimo de Domaio, que acometerá el Concello tras años de espera por Portos de Galicia, toma cuerpo. Ha concluido el plazo de presentación de ofertas por parte de las empresas candidatas a ejecutar unos trabajos que deberán estar en marcha esta primavera. Los técnicos integrantes de la mesa de contratación tendrán trabajo a destajo, pues se han presentado al concurso público hasta 24 empresas, un número muy alto para un contrato valorado en 100.000 euros. El concejal de Urbanismo, Odilo Barreiro, señala que el corto periodo medio de pago de facturas que tiene Moaña hace que a los concursos para obras se presenten cada vez más candidatos, de ahí la avalancha de ofertas para esta obra. En estos momentos el Concello moañés está pagando a sus proveedores en apenas 2,12 días de media, muy por debajo del límite legal.
La obra proyectada consiste en completar la senda peatonal y ciclista con la tercera fase del paseo marítimo. Serán unos 200 metros lineales entre el club de jubilados y el muelle. El proyecto incluye una zona de aparcamiento con 50 plazas. Cuando se convierta en una realidad, pondrá fin a la humanización del antiguo relleno acometido con escombro extraído de la construcción de la autopista AP-9.
El añadido por seguridad, por su parte, incluye un paso de peatones de cinco metros de largo, con bandas transversales de 50 centímetros, en disminución cara el norte, que se enfrenta al acceso de vehículos hacia el club de jubilados. Este paso de peatones partirá del final del paseo marítimo y lo conectará con la otra parte del añadido: una zona peatonal preferente.
Se trata de la tercera fase, pues los dos primeros tramos fueron ejecutados hace años por la Autoridad Portuaria de Vigo, titular de sus terrenos.
El Concello logró los fondos para ejecutar los trabajos de la Diputación de Pontevedra y la obra llegó a estar en riesgo ante los retrasos en el convenio para que Portos cediese los terrenos a la administración local.
La intervención de la Asociación de Veciños Monte Faro de Domaio fue clave en el diálogo entre ambas administraciones. La entrada en la presidencia de Portos de Galicia de Galicia de Susana Lenguas también permitió un impulso en la tramitación de los permisos necesarios.
El principal retraso en la firma del convenio partió precisamente del añadido que exigió la Xunta para permitir a los peatones salir en condiciones de seguridad del paseo por la zona de acceso al muelle de bateeiros de Domaio, por donde bajan habitualmente camiones de gran peso para cargar mejillón.
Este año
La finalización de este paseo, que debe estar lista antes de que concluya el año para que el Concello pueda justificar la ayuda de la Diputación, es una de las principales obras que el gobierno local moañés tiene previsto ejecutar a lo largo de 2020. Al menos una de las más demandadas por el movimiento vecinal.
