Lo que empezó como una iniciativa de un pequeño grupo de vecinos, citando a entidades sociales, deportivas y culturales, está cristalizando en la primera gran asociación de vecinos de la parroquia de Meira, que agrupará a todos los barrios. Este sábado se reunieron más de 200 personas y la asociación cuenta ya con representantes de un centenar de familias afiliadas. La próxima semana se decidirán los cargos de una directiva integrada por más de 20 personas y que está formada por dos representantes de cada barrio de Meira. La directiva espera duplicar el número de asociados en los próximos meses. El nombre escogido es el de "Asociación de Veciños NovaMeira".
Meira es la única parroquia moañesa sin un colectivo vecinal que agrupase a todos sus barrios y esto le perjudicaba tanto a la hora de reclamar ante las administraciones mejoras del día a día como a la hora de que se debatan y decidan las prioridades de los presupuestos municipales en los Consellos Veciñais. De hecho, la directiva, que ya presentó el registro del colectivo ante la Xunta, espera llegar a tiempo para participar en la redacción de los presupuestos del Concello para 2020.
Los reunidos en el local de jubilados el pasado sábado entienden que la de Meira es "la parroquia más abandonada de Moaña", en buena parte debido a que no tienen una tradición de asociacionismo vecinal como en otros lugares "aunque sí la tenemos a nivel cultural", recuerdan.
Señalan que son "la segunda parroquia moañesa en población y la primera en extensión" y sin embargo cuentan con problemas endémicos como caminos de la zona alta "en los que ni siquiera puede pasar una ambulancia si ocurre algo" o las aceras de las carreteras generales en muy mal estado.
A más largo plazo plantean varias mejoras como extender la senda peatonal del litoral de Moaña hasta la zona de O Cocho, poniendo en valor buena parte de la costa de la parroquia.
Es una medida que se lleva hablando desde hace años. El Concello tiene en proyecto, a corto plazo, ampliar el paseo por la explanada de Samertolaméu en el mismo proyecto de reforma de la senda de madera de la playa de A Xunqueira.
Ya durante el anterior mandato, desde el bipartito reconocieron que planificar inversiones en Meira es más difícil que en otras parroquias por la falta de colectivos vecinales. "Percibimos que casi toda las obras se hacen en el centro urbano, y después zonas como Tirán, Domaio y Berducedo tienen más voz a la hora de reclamar", indican desde la nueva directiva.
