ACE y PSOE se disputaron hasta el último momento ser la primera fuerza de la izquierda en Cangas, esa que le va a permitir abrir negociaciones para un pacto para alcanzar un gobierno cuatripartito o un tripartito de izquierdas. La propia cabeza de lista del BNG no escondió que los resultados les hacían prescindibles a ellos o a Avante!. Hubo un momento de la noche electoral que el PSOE se puso por delante de ACE, y hasta superar el 96% escrutado el partido del ahora alcalde en funciones, Xosé Manuel Pazos, no volvió a superar a los socialistas, pero por estrecho margen. ACE consiguió 2.301 votos al final y el PSOE consiguió 2.249, ambos quedan con cuatro concejales. Pero la diferencia es que el PSOE sube de uno a cuatro concejales, aupado por el efecto Pedro Sánchez y ACE, a pesar de contar con la Alcaldía pierde un centenar de votos respecto a 2015. El BNG demostró que tenía un electorado fiel y, aunque pasa de cuatro a tres concejales no se puede considerar el perdedor de la contienda electoral.

El Partido Popular baja un concejal. Pasa de ocho a siete concejales, a pesar de que el voto de la derecha se concentró mucho en la formación liderada por José Enrique Sotelo, de hecho las otras dos fuerzas de derecha: Cangas Decide y Ciudadanos no alcanzan concejal. Sotelo se queda sin posibilidad de configurar una alianza de gobierno, porque la candidata del PSOE ya anunció que se uniría a un gobierno progresista. Al PP le faltaron 328 escaños para igualar los ediles de hace cuatro años, que ya en ese momento fueron considerados unos malos resultados.

Moaña

MoañaEn Moaña, los resultados permitirán que BNG y PSOE reediten el pacto de gobierno de la última legislatura, con un grupo nacionalista más fortalecido pero con la agrupación socialista que se considera pieza clave del gobierno y no va a hacer concesiones. El Bloque que lidera la actual alcaldesa en funciones, Leticia Santos, logra situarse como la primera fuerza política de Moaña por delante del PP, que pasa a ser la segunda. Los nacionalistas obtuvieron 4.175 votos, el 40,15% del total de la papeletas; mientras que los populares, que lidera José Fervenza, obtienen 3.342 (32,14%).

El Bloque ganó 810 votos en estas elecciones con respecto a hace cuatro años; mientras que el PP perdió 739. Los socialistas, aunque mantienen los tres ediles, bajan en número de votos. Obtienen 1.700 sufragios (16,35% del total de los electores) 301 menos que en las pasadas municipales, perdiendo tres puntos porcentuales.

En el lado opuesto y con mejores resultados que en 2015, está la candidatura, que encabeza Javier Carro, que sube en 386 votos y que se quedó a 56 votos de obtener el segundo concejal.

Moaña es quizás la corporación en donde mejor salen las cuentas de cara a la formación de los nuevos gobiernos, y salvo sorpresas, BNG y PSOE se mostraron de nuevo dispuestos a repetir un gobierno progresista.

En Bueu el BNG repite victoria en unos comicios locales pero a costa de perder más de un millar de sufragios y de quedarse con solo ocho ediles, a apenas una treintena de votos del noveno, que le habría concedido la mayoría absoluta. Por ello, Félix Juncal deberá optar o bien por gobernar en minoría o bien por establecer algún tipo de pacto de gobierno con ACB o con el PSdeG-PSOE, las fuerzas más afines. El Partido Popular experimenta una considerable subida de 761 papeletas, lo que le permite doblar el número de concejales y de los tres que tenía pasa a conseguir seis. En cuanto a porcentaje de votos pasa del 19,60 que tenía en 2015 a un 29,94 por ciento.

La otra formación que ha doblado el número de representantes es el PSdeG-PSOE, que consigue dos concejales gracias a un notable incremento de votos. De los 570 de hace cuatro años ha pasado a contar con 889. ACB, por su parte, conserva el edil que tenía y gana también un centenar de apoyos para alcanzar los 433 sufragios y un 6,62 por ciento del total. Ciudadanos, el quinto partido que concurría a estas elecciones, logra 295 votos (un 4,51 por ciento), cantidad que no le permite entrar en la corporación.