El director del Instituto Galego de Promoción Económica (Igape), Juan Cividanes, se reunió con el portavoz de la Plataforma de afectados por los impagos del sector naval, el moañés Balbino Barcia, y otros dos integrantes del colectivo Cándido Parcero, de Vigo; y Manuel Figueiras, de Meira, dentro de la ronda de contactos que estos empresarios de la industria auxiliar están manteniendo para buscar una solución a su situación, de la que se trató en el Parlamento estas últimas semanas, a través de las iniciativas el PSOE y del BNG. Cividanes se comprometió con ellos, tal y como señala Barcia, a gestionar ayudas a fondo perdido para los empresarios que siguen trabajando y ver la posibilidad de otras para los que ya están parados y hacer frente a la amenaza de los bancos.

Tal y como señala, Balbino Barcia, en la reunión se habló de la posibilidad de aplicar la Ley de Segunda Oportunidad, aprobada en España en 2015 y que permite renegociar la forma en que se devolverán las deudas para que la persona afectada pueda hacer frente a sus gastos de vivir. En el caso de que no se llegue a un acuerdo, un juez podría cancelarla o exonerar de la misma al deudor. Si este es un particular se resolverá en los juzgados de Primera Instancia, mientras que si es un empresario se hará por la vía mercantil.

Es algo, dice el portavoz de la Plataforma, que quedó el propio director del Igape en estudiar, también a ver caso a caso, y se comprometió a desplazarse a Moaña, de donde son la mayoría de los afectados y en donde tiene su sede la Plataforma, para volver a reunirse con ellos e informarles de los resultados.

En la plataforma hay 12 empresarios que cuando se constituyó el año pasado arrastraban deudas de 5,5 millones de euros por impagos de grandes empresas del sector naval desde hace 8 años. Algunos de ellos tuvieron, incluso que cerrar sus empresas, y sufrieron enfermedades, como el infarto que padeció Barcia, por la tensión de vivir con la amenaza de embargo de los bancos ya que él, como otros muchos, pidieron dinero para acometer los trabajos en la industria que después no les pagaron. El problema, tal y como dicen, es que esos empresarios que le adeudan siguen trabajando con empresas con otros nombres y recibiendo ayudas con Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) falsos. "Los canallas son los que se llevan el dinero".

Los afectados tienen ahora pendiente una reunión con el conselleiro de Industria, que les gestionó el portavoz del PP de Moaña, José Fervenza, y que no pudieron celebrar esta semana porque tenían que acudir al parlamento en Santiago para participar en la defensa que hizo el BNG de una iniciativa parlamentaria en favor de ellos.

Ayer Barcia reprochaba que los bancos estaban maltratando a dos empresarios afectados a los que se les llegó a decir: "Si no pagas tú, pagarán tus hijos". Asegura que ellos están trabajando, y él se deja la piel, por buscar una solución, para que ellos puedan cobrar y pagar también.