Los hosteleros afectados con denuncias en esta inspección se defienden y argumentan esta piratería "por el elevado precio" de estos canales de pago. Aseguran que ya están esclavizados por la cantidad de impuestos que tienen que abonar y no pueden hacer frente a 4.000 euros al año, que es lo que cuesta abonarse ahora a estos canales, para poder dar a sus clientes los partidos de fútbol en cerrado por los que acuden también al bar: "Pagaría más de televisión que de autónomos", asegura un hostelero que reconoce que el canal privado para ver el fútbol supone cerca de 400 euros al mes "casi lo mismo que se paga por una hipoteca de una vivienda".

Durante la mañana de ayer y también por la tarde ya fueron a declarar a la Comandancia de la Policía Nacional de Vigo, los primeros hosteleros de Moaña denunciados y en estos días sucesivos lo harán el resto, aunque se han negado a prestar declaración ante los agentes y lo harán ante el juez.

"Si fuera asequible lo tendríamos todos los bares", asegura el propietario de otro local afectado: "Con cinco mesas que tengo, no puedo pagar 4.000 euros al año para que en la televisión se vean los partidos de fútbol que buscan los clientes".