"Pídese solidariedade, xenerosidade e visión de futuro", apuntó un técnico de la Diputación para hacer viable un proyecto que es "o mellor dos posibles" para mejorar las condiciones de una vía cada vez más transitada e insegura. "Se non vai desta, non se sabe cando irá", recalcaron los representantes de la Administración, dando por hecho que los más de 1,2 millones de euros presupuestados -el 70% aportado por la Diputación y el 30% restante por el Concello, que además debe poner a su disposición los terrenos, libres de cargas- quedarán en el limbo y se destinarían a otras necesidades. "A solidariedade debe repartirse ao 50% entre os dous lados do vial, non caer ao 100% dun só lado", apostilló una vecina.

Después de insistir en que se valoraron "todas as opcións e apostouse pola mellor", los representantes políticos y técnicos entregaron a cada propietario un documento donde figuran sus fincas, superficie y otros bienes afectados y medios de reposición. La edil de Obras e Servizos señaló que esta cuestión no puede demorarse por tiempo indefinido y anunció que se concederá de plazo "o mes de outubro" para que cada uno valore la propuesta, la matice con los técnicos y dé respuesta en una futura convocatoria para tal afecto. Sin cesiones, no habrá senda peatonal e incluso "periga o investimento da Deputación", insistió Giráldez, pues no está previsto expropiar y no hay dinero ni tiempo para más.