Muchos vecinos con fincas en el rural están durante estas fechas preocupados por las incursiones del jabalí, cuyas visitas suelen acabar en destrozos que echan a perder parte de las cosechas. Sin embargo estos animales no son los únicos invitados no deseados que acuden al campo. Un grupo de vecinos de Bueu impulsó en el mes de junio una iniciativa para crear una huerta comunitaria de agricultura ecológica en As Lagoas. La experiencia está funcionando relativamente bien, salvo por un detalle: los destrozos reiterados que una o varias personas realizan en la propiedad. Hasta la fecha han entrado en al menos media docena de ocasiones, la última esta misma semana. "Alguna vez se llevaron algo, pero ese no es su objetivo. El responsable viene solo a causar destrozos, a hacer daño por hacer daño", se quejaban ayer los afectados, que se reunieron en As Lagoas para denunciar públicamente la situación y pedir mayor vigilancia.
Este huerto comunitario está al lado del sendero peatonal del río Bispo y ocupa una superficie de cerca de 1.000 metros cuadrados, repartidos en dos parcelas cedidas desinteresadamente por sus propietarios. El proyecto cuenta con el apoyo del Concello de Bueu y está tutelado por Horta Agrelo, la empresa de agricultura ecológica asentada desde hace algunos años en Agrelo. "No sabemos qué es lo que pasa, pero parece que a alguien le debe molestar lo que hacemos aquí. Ya han venido varias veces a romper las plantas de los tomates, los pimientos o las lechugas", señalan los vecinos afectados.
En la actualidad esta huerta comunal cuenta está dividida en ocho "microparcelas" de unos 40 metros cuadrados. "Somos ocho familias y usuarios que estamos intentando cultivar hortalizas y legumbres de manera ecológica y para autoconsumo. Hay personas que están trabajando con verdadera ilusión y nos encontramos con alguien que solo quiere hacer daño", se quejan. El espacio aún cuenta con superficie para habilitar al menos otras tres "microparcelas" y los vecinos creen que los autores de los constantes destrozos lo que quieren es evitar que se consolide esta iniciativa y que se extienda a otras fincas del entorno.
Los afectados ya expusieron la situación al gobierno local de Bueu y piden que, en la medida de lo posible, se aumente la vigilancia y que de vez en cuando pase por la zona la Policía Local. Los propios vecinos están sopesando la posibilidad de instalar algún tipo de cámara de vigilancia y denunciar los hechos.
El alcalde de Bueu, Félix Juncal, lamentó ayer estos sucesos que "constatan a falta de sensibilidade e de respecto dalgunhas persoas". Fue el propio ayuntamiento uno de los impulsores de esta huerta comunitaria ecológica con un doble objetivo. "Por un lado, formar aos veciños na agricultura ecolóxica e ao mesmo tempo que puidesen dispoñer dunha pequena parcela para o seu autoconsumo", explica el regidor. De hecho, durante el verano los niños y niñas que participaban en el programa municipal de actividades lúdicas "Verán de xogos" acudieron varias veces a la zona para ver cómo se trabajaba y cultivaba en el huerto.
