Los hermanos José Manuel y Javier Tejedor son otros de los grandes invitados de esta edición del Festival Intercéltico. Después de triunfar por toda Europa, han ganado varios premios como el McCallan de gaita y son todo un referente dentro del folk.
-¿Cómo definirían Tejedor?
-Tiene ya desde el principio una personalidad propia, ya que desde los inicios el 98% de la música que grabamos son composiciones nuestras. Por eso tenemos nuestro propio sello.
-Tres hermanos que comparten la pasión por el folk. ¿Fue así como nació la banda?
-Cada uno empezamos con una especialidad, yo con la gaita y poco a poco se fue fraguando. Un poco también en la andadura individual de cada uno llegó un momento en el que la gente ya nos decía cuándo íbamos a hacer algo juntos. Fue cuando decidimos empezar a hacer un grupo, primero un cuarteto, y mientras íbamos componiendo y demás.
-¿Creanla música juntos o es un proceso que llevan a cabo por separado?
-Actualmente solo estamos mi hermano y yo. Depende, a veces trabajamos por separado y luego cuando nos juntamos le damos forma a las cosas.Llego con una idea y mi hermano la completa o al contrario. Tenemos canciones hechas cada uno por su lado y otras creadas por los dos.
-¿Se disfruta mejor el folk al aire libre?
-Tiene sus momentos. Evidentemente en el verano donde más gusta tocar es fuera. La gente está más a gusto y el tiempo invita, aunque aquí en el norte nunca se sabe [risas]. Aunque hay otros momentos, cuando presentamos cosas más serias, en los que también nos gusta mucho tocar en sala, donde la gente está sentada comodamente sentada, a gusto, en un ambiente controlado y que escuchen perfectamente sin ninguna clase de interferencia.
-¿Qué es lo mejor de tocar en festivales?
-El contacto con la gente, que siempre es muy diversa y no siempre es de aquí.
-Después de haber participado en festivales a lo largo de toda Europa, ¿qué es lo mejor de tocar tanto en Asturias como en Galicia?
-La verdad es que cuando llego a Moaña me encuentro con Anxo Lorenzo, con Iván Costa y un montón de amigos nuestros desde que somos muy niños. Nos los encontramos en festivales desde hace años y nuestras carreras van ahí paralelamente, la verdad es que es un gustazo el reencuentro con los amigos.
-Tras recibir tanto reconocimiento, ¿cómo sienta la fama?
-Se podría decir que la fama no existe. Nosotros desde un principio tuvimos un éxito que hasta entonces ninguna banda en Asturias había tenido. Lo que te da es muchos ánimos para seguir, componer nueva música y ofrecer a la gente lo que le gusta. Al final el intentar gustar termina cansando bastante. Nosotros creemos que nuestros discos son bastante eclécticos, siempre dan un poco de algo, y al que no le gusta una canción le gusta otra.
