Los edificios, al igual que las personas, necesitan de vez en cuando algo parecido a un chequeo médico. Y más cuando alcanzan una edad que se puede considerar centenaria. Es el caso de la casa consistorial de Bueu, que estos días es objeto de un estudio diagnóstico para comprobar la salud de su estructura. Ese examen está aún en marcha, pendiente de elaborar el informe definitivo, pero ya se pueden confirmar algunos de los síntomas que presenta el paciente. Las primeras conclusiones apuntan que es necesario reforzar la cimentación del inmueble, así como las vigas y el entramado que sostienen la tercera planta. "El peso que soporta actualmente la estructura es muy superior al que se preveía cuando se construyó el edificio", explican los técnicos, que de todos modos aclaran que no se trata de nada grave.
El análisis lo está realizando la empresa Bureau Veritas y el primer punto sobre el que se ha puesto la lupa es la cimentación. Las pruebas se realizaron donde están los departamentos de Estatística y Rexistro, en los que hay una estructura en arcos. "En esta zona el peso descansa sobre pilares y queríamos saber si lo que hay debajo es suficiente para soportar todo el peso", explican los técnicos municipales que acompañan a Bureau Veritas. La primera impresión es que esa cimentación no resulta suficiente y la recomendación más probable es que se apueste por "ampliarla y mejorarla".
El chequeo al estado de la casa consistorial continua con el examen a la estructura horizontal, que en su día se construyó en madera. La parte que sostiene al actual salón de plenos no parece sufrir desperfectos importantes: "Ya era una zona que se preveía que iba ser de mucho uso y las vigas están muy juntas", apuntan. No ocurre lo mismo con el entramado que sostiene la parte central de la planta alta, donde hoy está la Alcaldía y el departamento de Secretaría. En la época en la que se construyó el edificio no se preveía un uso tan intenso en el actual en el bajo cubierta y las vigas están más separadas. Esa estructura se reforzó cuando hace más de una década se trasladaron estas dependencias a la parte alta, pero aún así presentan algunos desperfectos.
Una de las conclusiones que sí está clara es la necesidad de reparar las canalizaciones que recogen las aguas pluviales de la cubierta. Esa canalización perimetral hace tiempo que no es objeto de una actuación de mantenimiento, por lo que parte del agua baja por las paredes exteriores del consistorio. "Esa humedad empapa los muros y pasa a las vigas de madera", explican los técnicos.
La tercera sede
El actual edificio que alberga al Concello de Bueu data de principios del siglo XX y es la tercera sede que ocupa la institución municipal desde la constitución del ayuntamiento, en el año 1836. El primer lugar que ocupó era un inmueble, que todavía existe, en el lugar del Enleito (cerca del cruceiro situado por encima de la Casa da Música) y luego se trasladó al lugar que actualmente ocupa la cafetería Jardín, frente a la playa de Banda do Río.
