Los hosteleros de Moaña han vuelto manos a la obra para cubrir sus terrazas, una vez que en pocos días concluye la temporada estival que, según la ordenanza en vigor, prohibía las instalaciones metálicas fijas en la vía pública y sólo autorizaba toldos y sombrillas, en lo que se denomina terrazas de velador. La normativa establece que a partir del 1 de noviembre y hasta el 1 de mayo, las terrazas pueden contar con instalaciones metálicas fijas para soportar los meses del duro invierno y ayer, al menos dos hosteleros, trabajaban en la calle Concepción Arenal en la instalación de las cubiertas, no sin quejas por parte del presidente de la Asociación de hosteleros, José Manuel Cruz, respecto al distinto trato que desde el Concello se dio a los establecimientos y la permisividad con la que se actuó con algunos de ellos.
Hay que recordar que la asociación se constituyó a principios del año cuando desde el Concello, el concejal encargado del área, Odilo Barreiro, empezó a aplicar la ordenanza de terrazas, una normativa que heredó este gobierno del anterior, para regular una situación de ocupación de la vía pública con mesas y sillas que provocaba las quejas de vecinos, defendidos desde la Federación de vecinos A Chamusca, y sobre todo peatones que se encontraban sin espacio suficiente para poder caminar.
Cuando Odilo Barreiro comunicó a los hosteleros en febrero los plazos de tiempo que tenían para adaptarse a la ordenanza, les pidió también que se asociaran para negociar aspectos de la ordenanza. El tiempo pasó, los hosteleros tuvieron que desmontar sus terrazas y la asociaciónfue perdiendo fuerza.