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Abalo presenta a sus socios de gobierno la auditoría de las cuentas de Cangas para que las informen

El edil de Facenda avanza de que la situación es crítica y que el Concello tiene hipotecado su futuro

Mariano Abalo en su despacho municipal. // Gonzalo Núñez

Ya hay auditoría de las cuentas del Concello de Cangas. El concejal de Facenda Mariano Abalo entregó a todos los grupos políticos que conformar el gobierno (ACE, BNG y Aspum) una copia del informe para que ahora ellos puedan añadir o sugerir cuestiones que les parezca que quedaron pendientes. Después de este trámite, su contenido se hará público. Mariano Abalo avanzó que la auditoría confirma que el tripartito cogió al Concello de Cangas en una situación crítica, que supuso que a lo largo de estos meses hubo que volcarse para el día a día fuese sostenible. Asegura a que la situación económica hipoteca el futuro del concello, por lo menos el del 2016 y también liga esta situación al contrato del agua.

Abalo sostiene que el citado informe está hecho por la interventora municipal con el fin de g garantizar que la auditoría tenga neutralidad político y credibilidad, donde tengan peso los criterios técnicos, no lo políticos. Asegura que es así porque de lo contrario se podría dudar de los datos que se darán a conocer.

También señala que algunos que tanto hablan del Plan Xeral se olvidan que la situación del mismo va a generar también reclamaciones judiciales. Mariano Abalo confía en que para la semana ya se pueda hacer público, una vez se incorporen al documento las sugerencias de los partidos que conforman el gobierno de Cangas.

Ahora, el gobierno municipal deberá decidir si con todos los datos en la mano realiza o no una profunda renovación en las ordenanzas municipales, que supuestamente tienen que ir a pleno de octubre. La auditoría es vital para comenzar a elaborar ya los presupuestos para 2016.

El alcalde Xosé Manuel Pazos hizo público en su momento que el gobierno local no tenía la intención de subir los impuestos ni las tasas municipales. Sí anunció que estaba en disposición de manifestar que se congelarían como mínimo.

Todos en el gobierno municipal estaban esperando los datos del concejal de Facenda, principalmente porque el tiempo se echa encima y hay que elaborar un nuevo presupuesto que ya comience a marcar diferencias con el anterior. De nuevo, el problema del Concello de Cangas, como el de otros muchos, es el de conseguir ingresos para atender los servicios, pero sin sangrar a los vecinos.

El Partido Popular siempre presumió de una gestión económica muy buena a lo largo de estos cuatro años. Se habló de un ahorro neto nunca visto y de poner el marcador del Concello de Cangas a cero con el plan de pagos a proveedores, donde se hicieron frente a algo más de 12 millones de euros que había de deuda con los acreedores. El PP nunca creyó en la auditoría de Mariano Abalo. Siempre dijo que el concello esta siendo auditado constantemente porque tenía que hacer frente al plan de ajuste aprobado.

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