La lluvia, el viento y el frío son tres de los enemigos tradicionales de la garganta, y el recurso a San Blas es uno de los remedios más socorridos para hacerle frente. Todos esos elementos concurrieron ayer en la pequeña capilla de A Madalena, donde centenares de devotos, muchos de ellos incondicionales que no se pierden ninguna edición, se dieron cita para pedir favores o agradecer los ya concedidos. La mayoría aprovecha para presentar sus ofrendas a este santo "tan milagreiro e avogoso dos males de garganta", como testimonia una de las devotas, que no se pierde la tradicional bendición de panes que, repite, tienen la milagrosa propiedad de perdurar en el tiempo que no se atribuye a las levaduras.

Con el programa ceñido a las celebraciones religiosas, la capilla y su entorno acogieron ayer la primera de las tres jornadas de fiesta en honor a San Blas. Los actos comenzaron con una tirada de bombas de palenque y la misa a las diez de la mañana con la tradicional bendición de los panes. La solemne se ofició pasado el mediodía, a las 12.30 horas, y contó con la participación del Coro de O Hío. Al finalizar salió la procesión por el atrio, acompaña de un nutrido grupo de fieles. Entre los participantes se dejaron ver el alcalde, José Enrique Sotelo, y su socio de gobierno, Nardo Faro Lagoa. Los presentes pudieron probar los vinos del país en el furancho habitado en el entorno. Por la tarde se ofició una misa rezada, concierto y pasacalles de la charanga Rouba Bicos.

Aunque las inclemencias del tiempo y el hecho de coincidir en día de semana no invitaban a acudir a San Blas, la comisión de fiestas que preside Constante Soliño se mostró "satisfeita" por la respuesta ciudadana y el ambiente que se disfrutaba en el atrio, y aprovechó para extender la invitación al fin de semana, pues los festejos continúan. Para los amantes del baile, el viernes habrá verbena nocturna con Marbella y Charleston Big Band. El sábado la jornada comenzará con pasacalles de Rouba Bicos y a las 12.30 se oficiará la misa solemne. Por la tarde, más actos lúdicos con juegos populares, música y baile tradicional con Charaviscas, de Domaio. El fin de fiesta de San Blas estará amenizado por las orquestas Sintonía de Vigo y Televisión.