Reivindicar el reconocimiento del Camino de Invierno fue el principal cometido de la caminata celebrada ayer por el Partido Popular de Lalín. Más de 250 jóvenes tomaron parte en el recorrido, que partió de la iglesia de Lalín de Arriba y bajó por la ruta jacobea hasta el Kilómetro Cero. Luego hicieron un desvío para visitar la Praza de Abastos. "Queremos señalizar una variante para que los peregrinos que pasen por aquí hacia Santiago vengan a la plaza a abastecerse de productos naturales y también para que compren en el comercio", declara el candidato popular, José Crespo, que encabezó la marcha. El alcalde desveló que el reconocimiento de esta variante del Camino Francés será oficial con la nueva ley de patrimonio e indicó su intención de promover también el Pazo de Liñares, a 150 metros de la ruta.

La caminata prosiguió luego hasta la Carballeira do Rodo, en donde los participantes pudieron degustar productos autóctonos. Además, allí hubo juegos para los niños, por lo que las familias con infantes de corta edad se dirigieron directamente a la meta. En la ruta participaron la mayor parte de los candidatos populares, con las principales novedades arropando a Crespo al frente de la "marea" de las Nuevas Generaciones, como la definieron los organizadores. El líder popular prometió "especial dedicación" para la juventud si renueva su mandato, con la renovación de las ayudas a la creación de microempresas -las dos convocatorias anteriores permitieron crear 28 empleos- o la puesta en marcha del vivero de empresas. Y cifra en 6.000 personas los participantes en la "amplia oferta" de actividades juveniles, entre campamentos, talleres, cursos o cabalgatas de reyes. Además, más de 750 jóvenes participan en las escuelas deportivas municipales y en los clubes. Y 4.000 personas, el 20% de la población lalinense, practican deporte en las distintas instalaciones municipales, indican desde el PP.

Réplica a Casares

Por otro lado, los populares acogen "con satisfacción" que el candidato del PSOE, Nicolás González Casares, "reconozca por fin el importante valor del Paseo do Pontiñas y que deje de menospreciarlo y de criticar que se hagan inversiones en su mantenimiento". En todo caso, Crespo lamenta que "solo se acuerde en positivo de este enclave natural para la pelea política, una pelea que iniciaron en 2001, cuando se opusieron a su construcción". Sostiene que el "urbanismo sostenible" de que habla Casares ya está implantado en Lalín desde la aprobación del PXOM en 1999.