La Consellería de Medio Rural prevé contratar trabajos de prevención de incendios en el distrito forestal XVI, que abarca las dos comarcas y Cerdedo, por un importe de 618.701 euros. La cuantía comprende actuaciones tanto del bienio 2019-2020 como de 2020-2021. Así se desprende del Plan de Prevención e Defensa Contra os Incendios Forestais de Galicia, Pladiga 2020, que acaba de difundir el departamento autonómico.
El equipo propio del distrito forestal se encargó de mantener en buen estado los 164 puntos de acopio de agua, así como rozar con medios mecánicos 195 hectáreas, y otras 20,50 a mano. Además puso a punto 29 kilómetros de pistas forestales y acometió quemas controladas en 231,38 hectáreas. Al margen de estas intervenciones, Medio Rural destina 270.7490 euros a contratos por procedimientos abiertos. En el presente ejercicio, con 110.110 euros se están ejecutando áreas cortafuegos en 13,33 hectáreas, y fajas auxiliares de pistas en 9.32. Unas 2,44 hectáreas mejorarán sus devasas (son los cortafuegos) y en 7,8 kilómetros la adjudicataria actúa en pistas forestales. Estos trabajos volverán a licitarse este año y en 2021, por 160.630 euros, para optimizar cortafuegos, en otras 4,1 hectáreas y mejorar 6,7 kilómetros de pistas.
Obras idénticas salen a concurso, pero mediante contratos menores. Son, en total, 66.986 euros. Este año están ejecutándose 39.979 euros para 6,36 hectáreas de cortafuegos, 4,45 hectáreas de fajas auxiliares de pistas, 1,16 hectáreas de mejora de devasas y 4,1 kilómetros de pistas forestales. En este 2020 también hay que contratar, por 27.007 euros, cortafuegos en 3,27 hectáreas, fajas auxiliares en otras 2,29, devasas en 0,60 y mejora de pistas en un tramo de 2,1 kilómetros.
Al margen de estas licitaciones, Medio Rural invertirá otros 280.975 euros en encargos fuera de los perímetros de alto riesgo de incendio.
Además de facilitar datos sobre las intervenciones en terrenos del distrito XVI, el Pladiga incorpora como novedad la salida de las dos parroquias de Dozón que desde hace años figuraban en el listado de zonas de alta actividad incendiaria. Santa María de Bidueiros y Santa María de Dozón eran las únicas de las dos comarcas que aparecían en la lista, y ahora salen de ella porque en los dos últimos años la superficie total media por incendio es igual o inferior a 3 hectáreas. Si antaño ambas estacaban por la gran virulencia de sus fuegos forestales, en los dos últimos ejercicios la superficie total media de los incendios en Dozón fue de 0,51 hectáreas, y en Bidueiros, de 0,46. Junto a las dos de Dozón también dejaron de ser de alta actividad incendiaria otras 44 parroquias en Galicia, y ahora mismo hay 28. A modo de curiosidad; ninguna de ella se localiza en la provincia lucense.
Pero volvamos al norte pontevedrés, puesto que Forcarei contará con uno de los tres sensores meteorológicos de un proyecto piloto de sensorización para medir datos del entorno donde pueda estar habiendo un incendio. Los otros dos sensores estarán colocados en Chandrexa de Queixa (Ourense) y Zas Pico Meda (A Coruña). El piloto ofrecerá datos sobre pluviometría, humedad o velocidad del viento. La idea es que esté colocado u funcionando a lo largo de este año.
Forcarei, por otra parte, es uno de los 259 concellos gallegos que decidió elaborar un Plan Municipal de Prevención e Defensa contra Incendios Forestais. La misma decisión tomaron también Silleda, Rodeiro, A Estrada, Agolada, Rodeiro y Cerdedo-Cotobade. Tanto Forcarei como Silleda entregaron su planificación en febrero de este año, mientras que tanto Rodeiro como A Estrada y Cerdedo-Cotobade lo hicieron ya en junio de 2019. El de A Estrada cuenta ya con un informe favorable enviado. Por su parte Agolada aún no remitió el documento. Los tres concellos de Pontevedra que ya tienen su plan aprobado de forma definitiva son Marín, Mos y Valga. En la provincia, 48 decidieron redactar esta planificación.
