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De cómo David dejó sin cobertura a Goliat

Retiran del todo la antena de telefonía de Benito Vigo que causó gran movilización vecinal y desisten de instalarla

Retirada de la antena, en febrero de este año. // Bernabé/Juan Carlos Asorey

En ocasiones, la voz de David protestando contra Goliat se escucha alto y claro. Y así sucedió en el caso de la movilización vecinal contra la instalación de una antena de telefonía móvil en el centro de A Estrada, en el número 14 de la avenida Benito Vigo. La colocación de este dispositivo suscitó una gran contestación ciudadana, con recogida de firmas incluida, que no tardó en encontrar en el Concello un interlocutor para llegar profundizar en el asunto. Tras meses de acciones, reacciones e incertidumbre, la semana pasada la empresa que promovía la instalación de esta antena comunicó al ayuntamiento su intención de retirar por completo todos sus elementos y le trasladó su decisión de desistir de este emplazamiento.

El edil estradense de Urbanismo, Gonzalo Louzao Dono, fue el encargado de hablar con la firma y de trasladarle la buena nueva a la plataforma vecinal creada contra esta antena. Louzao recordó que el Concello había dictado una orden de ejecución para forzar la retirada de este dispositivo de lo alto de un edificio en la popular Gran Vía. Insistió en que esta orden no afectaba de manera exclusiva a la antena en sí, sino a toda la instalación. En febrero de este año la empresa retiró la antena pero presentó un proyecto de legalización, dado que no cumplía con las condiciones urbanísticas contempladas en el Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) por una cuestión de altura.

Louzao Dono explicó que la pretensión de la firma era instalar, en lugar de una antena grande, varias de menor tamaño, una cuestión de la que el Concello -apuntó- hizo partícipes a los vecinos. El titular del departamento municipal de Urbanismo indicó que, ante esta situación, el gobierno había decidido examinar de nuevo todo el procedimiento, reconociendo que también a nivel administrativo "tenía sus deficiencias". Insistió que, en todo caso, la empresa tenía que retirar todos los elementos que quedaron tras bajar la antena, no habiendo, por tanto, cumplido la orden de ejecución municipal íntegramente. Sin embargo, el responsable de Urbanismo recibió hace unos días una llamada de la compañía confirmando su intención de enviar al número 14 de la avenida Benito Vigo una empresa desinstaladora para retirar la totalidad del aparato. La semana pasada se produjo este desmontaje y estos días los técnicos municipales fueron a realizar la visita de comprobación, antes de comunicar la situación a los vecinos. Su reunión de cada primer viernes de mes sirvió para compartir con ellos que la empresa desistió finalmente de instalar en este punto de la capital estradense una antena de telefonía que tantos quebraderos de cabeza les ha dado.

Gonzalo Louzao subrayó que, en este caso, se dieron las circunstancias a nivel urbanístico para poder frenar la instalación contra la que se movilizaron los vecinos, a los que quiso felicitar por lo conseguido. "Es un éxito suyo", dijo.

Los vecinos sacaron su protesta a la calle a través de cartelería instalada en múltiples escaparates, temerosos de la repercusión que este dispositivo pudiese tener para la salud pública y preocupados por su proximidad a una escuela infantil o a equipamientos públicos cercanos, como el colegio Pérez Viondi, el centro de salud, el centro de alzhéimer radicado en el Novo Mercado o la residencia de mayores. No tardaron en poner en marcha una recogida de firmas y tampoco se hizo esperar el apoyo de miles de personas a esta causa.

La firma que colocó esta antena de telefonía presentó recursos contra el requerimiento de reposición de la legalidad cursado por la administración municipal, alegando que cumplía con los parámetros indicados por Industria. El gobierno reconoció este extremo pero advirtió que no reunía las condiciones urbanísticas para que el ayuntamiento otorgase licencia y, por tanto, ordenó su retirada. La administración interpuso multas coercitivas para forzar la evacuación del dispositivo.

Han sido meses de gestiones, reuniones, trámites y movilización que ahora pasan a la historia. David dejó esta vez sin cobertura a Goliat. No se quedó de brazos cruzados y alzó su protesta contra algo que no consideraba apropiado. Su voz se hizo escuchar y venció. Al menos en esta batalla.

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