| La parroquia lalinense de Goiás celebró anteayer su tradicional baile durante la procesión. Una tradición que se recuperó en la década de los años 60 y que honra a la Virgen del Rosario. Como cada año, los más jóvenes del lugar, en parejas, forman parte de este desfile. Los participantes lucen sus mantones, que sustituyen a las antiguas colchas, mientras marcan el paso delante de la Virgen, además de tener que pasar por debajo de un arco decorado con flores, que este año sujetaban dos niños. También hacen genuflexiones ante la imagen. Esta celebración, junto al concierto de la Banda de Lalín concluyeron un año más el programa de las Festas do Rosario.