El Auditorio Municipal Manuel Costa Casares de Agolada se quedó pequeño para albergar a los muchos vecinos que acudieron a la reunión convocada por el alcalde, Luis Calvo Miguélez, para dar cuenta de la situación actual del Concello. Arropado por sus concejales, el nuevo regidor dio a conocer los sueldos del personal municipal, incluido el de su predecesor y las dietas pagadas a su equipo, las facturas pendientes o las líneas de crédito. Además, los nuevos gobernantes adelantaron cuales serán los pasos a seguir durante su mandato y atendieron las peticiones formuladas por los vecinos, en un encuentro de algo más de hora y media celebrado en la noche del lunes.

Las dietas de la anterior corporación, solo de 2018 y lo correspondiente a 2019, ascienden a 23.696 euros. En este período los gastos en total por concejales son: Héctor Martínez, con 6.416 euros; Alberto Vilariño, 5.760 euros; Juan Ramos, 5.600; Paula Crespo, 720; Yolanda Varela, 1.040, Noberto Peitado, 160; José Rivadulla, 720; y, por la oposición, Jesús Sánchez (1.200), María José Buyo (1.120)e Iria Pampín (960). En este mismo período, el gasto por comidas, tanto las de obreros como las oficiales, suma 4.190 euros, y el de combustible, que incluye la calefacción del consistorio y de la Casa de la Cultura, es de 59.432 euros. El importe total en reparaciones de vehículos y maquinaria asciende a 57.516 euros, y hay 7.303 euros de un abogado.

Sueldos

Dio un repaso por los suelos anuales de los trabajadores del Concello, entre ellos los más elevados son: Ramiro Varela cobraba 39.500 euros, la trabajadora social, funcionaria de carrera, tiene un sueldo de 36.600 o el secretario de intervención recibe 52.650 euros. El auxiliar de Policía Local cobra 25.103 euros, la auxiliar administrativo adjunto a secretaría-intervención, 24.946 euros, el auxiliar de administrativo adjunto a servicios sociales, 20.515, la auxiliar de biblioteca, 20.498 euros, el operario de servicios laboral fijo, 19.742 euros, el técnico de empleo, 27.243 euros, la orientadora laboral, 22.165 euros, la actual trabajadora social, sustituta por baja de la titular, 23.787 euros y la educadora social, 24.717 euros. Después figuran operarios de servicios con sueldos de entre 16.489 y 17.667 euros, el limpiador del centro de desinfección cobra 7.814 euros, el conductor de recogida de basura, 15.963 euros y las auxiliares del SAF rondan entre 13.498 y 14.965 euros. "Mi sueldo estará entre 1.200 y 1.600 euros, me daría vergüenza cobrar 40.000 al año y el grupo de gobierno no tendrá dedicación exclusiva, pero aprobaremos unas dietas", indica Calvo.

"Todas las cifras que estoy dando es vuestro dinero", recalcó el alcalde e informó de las cuentas actuales del Concello: "en caja tenemos 500.000 euros, ésta es la situación actual del Concello y aquí hay un problema, porque las obras del año pasado no se hicieron". Le informaron de que hay tres líneas de crédito y el nuevo gobierno está a la espera de que le remitan los extractos bancarios. Calvo incide en que llevará a cabo la auditoria para aclarar todo.

El gobierno promete mantener una reunión cada tres meses en las parroquias para conocer las necesidades y realizar un inventario de los bienes del ayuntamiento. La aprobación del PXOM, el acondicionamiento de pistas, mejorar las traídas de agua, crear empleo, que incluso, baraja la construcción de un nuevo polígono o reducir el IBI al mínimo legal son algunas de sus prioridades. También pretende ampliar el horario de la guardería, arreglar el gimnasio del colegio, permitir que los alumnos jueguen en el campo de fútbol y conceder un cheque bebé de 2.500 euros. Entre las peticiones que hicieron los vecinos está romper con las barreras arquitectónicas de las calles de Agolada y del auditorio, que exista transparencia o tomar partido para que las parcelarias sean un realidad, para lo que se reunirán inmediatamente porque el impacto ambiental caduca en noviembre.