El Sindicato Labrego Galego (SLG) manifiesta que granjas del municipio de Agolada temen quedarse otro año más sin la bonificación del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) a consecuencia de la "excesiva burocracia", después de que en 2018 la mayoría de las explotaciones de este ayuntamiento quedase sin esta ayuda.

"De esta vez, y tras la experiencia del año pasado, las granjas solicitantes prepararon con suficiente antelación todos los documentos exigidos para tramitar la ayuda en plazo", señala el sindicato, que explica que "algo nada fácil, de hecho, muchas de las granjas que podían beneficiarse de la bonificación, especialmente aquellas regentadas por personas mayores, ya no pasaron el trabajo de enfrentarse a ese vía crucis burocrático y renunciaron a realizar la solicitud". Indica que la sorpresa para las granjas que sí tramitaron la petición vino este pasado martes, día 2, cuando "el funcionario municipal encargado de la gestión de la ayuda comunicó que, de las 30 granjas que pidieron la bonificación, solo tres acercaban la documentación completa". Al preguntar que documento faltaba, les informaron que el certificado para acreditar la actividad agraria debía ser oficial de la Xunta de Galicia y tener código de verificación para evitar falsificaciones. "Más allá de que se culpabilice a priori a las personas solicitantes, previendo que puedan delinquir falsificando un documento público, resulta desconcertante que los documentos acreditativos de la actividad agraria se usan habitualmente como el censo de la explotación de la Oficina Agraria Virtual o la Carta de Saneamiento, no sirvan en el Concello de Agolada" y puntualiza que "de hecho, en Lalín y Silleda hay ayudas semejantes y no piden el certificando de la Xunta con código de verificación".

Considera que el problema va más allá de un aumento innecesario de la burocracia. "Es que el Concello les dio un plazo a las granjas afectadas hasta hoy, 5 de abril, a las 11:30 horas, para presentar el documento requerido que, en circunstancias normales, tarda entre una semana y 15 días en ser expedido", apuntó ayer el ente. El Sindicato Labrego Galego mantuvo una conversación telefónica con el alcalde de Agolada, Ramiro Varela, "quien nos garantizó que desde el Concello van a gestionar directamente con la Xunta de Galicia para que les envíen estos certificados en plazo. Esperamos que cumpla su palabra y que no quede fuera ninguna de las granjas que solicitaron la bonificación del IBI". También espera que para el próximo año el Concello de Agolada se atienda a lo que estipula la Ley 39/3015 del procedimiento administrativo común de las administraciones públicas que en el artículo 28.2 dice que "los interesados tienen derecho a no aportar documentos que se encuentren en poder de la administración actuante, en este caso en el Concello, o que fuesen elaborados por cualquier otra administración, en este caso en concreto, por la Consellería de Medio Rural".