El grupo municipal del Partido Popular de Lalín presentará en el próximo pleno -previsto para el 22 de febrero- una moción por vía de urgencia para reprobar al alcalde, Rafael Cuíña, por "insultar y atacar directamente" a una comerciante que forma parte de la directiva de la Asociación de Empresarios de Deza (AED). "Lo único que hizo fue defender su negocio y el sector comercial, al que representa", esgrime el portavoz popular, Javier Blanco.

" Bótanse á mínima os lobos ao pescozo, e tamén algunha loba que, á mínima, asoma a patiña" escribió el regidor en una red social. Aunque después llamó por teléfono a la aludida para pedirle disculpas, el comentario ya había provocado reacciones de vecinos y políticos. Entre los primeros en saltar figura el edil no adscrito, Juan José Cruz, que se preguntaba por qué, a diferencia de otras veces, no había condenas por parte de los técnicos de la Oficina de Igualdade o de colectivos feministas locales ante un comentario "machista". Idéntica reflexión hacía ayer el portavoz municipal del PP, José Crespo, al anunciar que pediría la reprobación del alcalde: "Llamar loba, atacar y menospreciar a una comerciante es, cuando menos, indecente", escribía.

"Esta nueva salida de tono con tintes machistas no es un caso aislado por parte del alcalde de Lalín, y por eso queremos saber qué opinnan los demás socios de gobierno, que aguardamos que condenen abiertamente y se posicionen en contra de comportamientos así", expone Javier Blanco. A su juicio, "no se puede permitir que se normalice y se haga borrón y cuenta nueva, como si no hubiera acontecido algo que es vergonzoso por parte de un político que representa a todos los lalinenses". Critica que "el mismo Rafael Cuíña al que se le llena la boca hablando de igualdad y de feminismo, luego tenga comportamientos sectarios y de un machismo de lo más rancio".

El PP también lanzará una batería de preguntas en el pleno sobre la decisión inicial de la junta de gobierno local de denegar la celebración de la III Feira de Oportunidades, origen del nuevo enfrentamiento entre Cuíña y la comerciante en cuestión. Quiere saber qué concejales del cuatripartito eran los que se oponían al mercado durante la Feira do Cocido, motivo por el cual fue inicialmente desautorizado. En este sentido, les pregunta si consideran que el esfuerzo de los comerciantes para organizar este mercado "desluce" la Feira do Cocido o si creen que es "competencia desleal" para los puestos que pagan por instalarse en la Carpa Mahou, y cuántos de éstos son de Lalín.

Crespo pregunta si fueron Nicolás González Casares (PSOE), Francisco Vilariño (BNG) y Lara Rodríguez Peña (PAC) los principales impulsores de denegar la autorización a la patronal dezana "exclusivamente por razones políticas". Insinúa que el regidor y el edil de Comercio, José Manuel Fernández, que habrían garantizado previamente los permisos siempre que los informes policiales fueran favorables, "se plegaron al criterio defendido principalmente por BNG y PSOE, a pesar de que la decisión perjudicaba notablemente al comercio de Lalín". Y añade que Rafael Cuíña "renunció a ejercer sus funciones como alcalde para que no le estalle a tres meses de las elecciones municipales la bomba de relojería que es el cuatripartito". "¿Sigue arrepentido de destinar recursos públicos a la AED para acciones de dinamización del comercio y la hostelería?", remata Crespo.

Lo acontecido con la feria de la AED es "una prueba más de que el cuatripartito es un desgobierno, que está en descomposición y que el alcalde se deja someter por los socios del BNG y del PSOE únicamente por intereses políticos, aunque eso signifique ir en contra de medidas buenas para los vecinos de Lalín", valora Javier Blanco.