Al margen de los regalos y las cenas en familia, la tradición reza que en Navidades hay tres fechas en las que los niños aprovechaban su arte musical y coral para recaudar golosinas, productos navideños o dinero con el que pder comprar aquellos. El día de Navidad se cantaban, casa por casa, villancicos, mientras que en Fin de Año los temas estrellas eran las poder o manueis, una tradición idéntica ala que mantiene el país portugués. Por último, los días 5 y 6 de enero se recitaban los cantares o aguinaldos, en los que se relata la adoración de los Reyes Magos al Niños Jesús o la huida de la Sagrada Familia a Egipto. Ayer, estos cantares sonaron en diversos comercios y demás establecimientos del casco urbano de Lalín y Silleda, gracias a los niños y jóvenes que integran el grupo de gaitas Os Trasnos de Doade así como Aires de Trasdeza. Y como la ilusión de la noche de Reyes no tiene fecha de caducidad, a diferencia del DNI, los vecinos más mayores de la comarca también pudieron disfrutar de los Cantos de Reis, caso de la residencia de mayores de Vila de Cruces, que recibió en la tarde del viernes la visita de Os Sin Son Ghaiteiros.