Gracias a los datos sobre resolución de asuntos, el informe del Consejo General del Poder Judicial permite calcular las tasas de pendencia, de sentencia y de congestión que presentan los partidos judiciales.

La tasa de pendencia se obtiene al dividir los asuntos pendientes al final del trimestre entre los resueltos en ese mismo plazo. Este cociente sube tanto en A Estrada, que pasa de 0,84 a 2,28, como en Lalín, que asciende de 0,88 a 1,83. Si multiplicamos por 12 esa tasa, obtenemos el número de meses que precisaría cada juzgado para poner todos los asuntos al día y siempre que no ingresase ningún nuevo expediente. De este modo, al multiplicar la tasa de 2,28 de A Estrada, obtenemos un plazo necesario de 27,3 meses, es decir, un año y tres meses, mientras que el caso de Lalín se precisan 21,9 meses.

La tasa de resolución es el cociente entre los asuntos resueltos y los ingresados. Cuanto más alta sea la tasa, en mejor situación se encuentra el juzgado. La de A Estrada ha subido levemente, de 0,22 a 0,23, y la de Lalín lo ha hecho de una forma más notable, de 0,20 a 0,32. Por último, la tasa de congestión es el resultado de dividir los asuntos pendientes y los registrados entre los resueltos en el mismo periodo. Cuanto más baja sea, mejor es el resultado del trabajo de la sala judicial. Pero la huelga ha impedido, aquí, un descenso: en A Estrada la tasa pasa de 1,84 a 3,29, y en Lalin asciende de 1,88 a 2,83.