El monasterio de Silleda registró 515 entradas durante las jornadas festivas de Semana Santa, una cifra que demuestra el interés que despierta este conjunto histórico y patrimonial a pesar de las borrascas que predominaron durante esas fechas. Por jornadas, la del Jueves Santo fue la de mayor afluencia, con 158 visitas, seguida por la del Sábado Santo, con 131. El Domingo de Pascua accedieron al cenobio 124 personas, mientras que el Viernes Santo fueron 102. Los accesos durante estos cuatro días suponen casi la mitad del balance mensual de visitas, puesto que durante el mes de marzo se registraron 1.212 entradas al monasterio románico.

La edil de Turismo, Ana Luisa González Costa, recalca que "el balance no puede ser más satisfactorio, teniendo en cuenta que el tiempo sigue sin acompañar". A día de hoy, Carboeiro funciona ya con horario de primavera, de modo que abre de martes a domingo en turno de 11.00 a 14.30 y de 16.30 a 19.00 horas. Este horario se ampliará hasta el próximo mes de junio, de modo que en julio se volverá a ampliar, abriendo hasta las 20.30 horas. En cualquier caso, los lunes estará cerrado al público. Carboeiro cuenta desde hace años con una senda botánica y la Ponte do Demo, que suponen enclaves a visitar, al margen de la Fervenza do Toxa, que además está unida al monasterio a través de una ruta de senderismo.