El pabellón multiusos de Fexdega se ha convertido en un albergue para personas sin hogar con capacidad para 35 plazas, mientras duren las medidas de confinamiento. La medida fue acordada por el departamento de Servizos Sociais de Vilagarcía, dirigido por la concejala Tania García, y la Cruz Roja. De esta forma se da una respuesta a la demanda de estos usuarios que sobrepasaba la capacidad del albergue que la ONG tiene en la céntrica Plaza de la Constitución. Este local queda cerrado y se centraliza toda la asistencia en el recinto ferial.

El centro de acogida provisional se estrenó con una veintena de usuarios (17 hombres y 3 mujeres). Durante la mañana de ayer, operarios municipales, voluntarios y miembros de Cruz Roja ultimaban el acondicionamiento de las instalaciones de Fexdega para que las personas sin hogar tengan un techo bajo el que cobijarse. Por la tarde, comenzaban a entrar los primeros acogidos.

Con esta medida, se soluciona un problema de falta de espacio para atender la demanda en el albergue de la Cruz Roja en la plaza de la Constitución, que se estaba paliando con la contratación, a cargo del Concello, de huecos de alojamiento en hostales de la ciudad.

En el centro de acogida de Fexdega además de centralizar los servicios y la atención a estas personas, se garantiza asimismo el confinamiento que afecta a toda la población mientras dure el estado de alarma aplicado por el Gobierno para frenar la propagación del coronavirus.

En la en marcha del albergue de Fexdega colaboraron distintos servicios del Concello, además de Cruz Roja y Cáritas, cuyos voluntarios, junto con los operarios municipales, trabajarán en la prestación del servicio.

Durante la estancia, los usuarios, además de alojamiento, tendrán servicio de manutención mediante un catering contratado. También tendrán acceso a los servicios de higiene del recinto ferial (aseos, duchas, etcétera).

Según el protocolo diseñado por el departamento de Servizos Sociais, las personas alojadas en Fexdega podrán contar con actividades de animación durante el día, siempre respetando la orden de confinamiento.

Las camas están distribuidas en un espacio acotado dentro del propio pabellón, diferenciando la zona para hombres y para mujeres, y garantizando la ventilación del aire. En una zona contigua se habilitó el comedor, con mesas individuales que mantienen una prudente distancia de seguridad entre los usuarios.

El albergue de transeúntes que dispone Cruz Roja en la plaza de la Constitución tiene capacidad para diez personas, pero la demanda en estas circunstancias especiales duplica el número de camas, por lo que se optó por habilitar Fexdega como centro de acogida provisional, con una oferta más amplia.