El cierre de fronteras entre Galicia y Portugal como consecuencia de la crisis del coronavirus ha hecho que desde primera horas de la mañana se registran caravanas interminables en las carreteras de Portugal que acceden a España.

Los transportistas son los más afectados, ya que sufren retenciones de hasta ocho y diez kilómetros, según indican varios de los consultados. De este modo acumulan ya varias horas de retraso en su viaje de regreso a casa, lo cual lleva parejas importantes consecuencias económicas cuando los afectados son camiones cargados de mercancía.

Algunos de los camioneros atrapados en esta "emboscada" son arousanos, otros trabajan para empresas de Vigo, los hay de O Morrazo y, en definitiva, se ven afectados profesionales y empresas de toda Galicia. Los consultados telefónicamente, mientras se encontraban en pleno atasco, explican que regresan de Portugal después de haber descargado mejillón gallego en el país vecino.

Y a causa de los controles en la frontera "estamos completamente parados desde hace horas viendo como los turismos avanzan por el arcén, y nada parece indicar que esto vaya a solucionarse pronto, por lo que quizás perdamos buena parte del día en este viaje", lamentan.