El ciclo de conciertos "Achégate ao Salón" se abrirá este domingo en Vilagarcía con la presencia de Marem Ladson. Representa una de las más firmes realidades dentro del talento musical joven de este país. El ejemplo de todo ello es su rápido crecimiento dentro de un planeta en el que tanto la crítica como la competencia son feroces. Su constante evolución ya le ha permitido formar parte de grandes festivales como el Dcode?, Vida Festival o Monkey Week cuando apenas había sacado a la luz su primer tema "All My Storms".
Hija de padre norteamericano que fue jugador profesional de baloncesto y madre ourensana, periodista, le cuesta encontrar el gen de su extraordinario talento musical. Una virtud de la que podrá disfrutar el público el domingo 16 de febrero en el Salón García a partir de las 12.30 del mediodía.
-Primera vez en Vilagarcía. Nadie mejor que usted para presentar el estilo de música que se van a encontrar aquellos que todavía no la conocen.
-Va a ser la primera vez que toque en el Salón García. Será un concierto acústico, muy íntimo. Llevaré mi guitarra eléctrica y tocaré en un formato en el que me siento muy cómoda. Por ser el estilo de concierto que creo que se adapta perfectamente a mis canciones, que no son acústicas a priori pero que las he arreglado para que suenen lo mejor posible. También tocaré algunas de las canciones que estarán en mi próximo disco que espero sacar a finales de año, pero antes saldrá un pequeño trabajo con cinco canciones.
-Que sepa usted que la familia Ladson ya ha firmado alguna gran actuación en Vilagarcía, concretamente su padre Willie. Fue entre canastas, nada que ver con las tablas de un escenario.
-La verdad es que era súperpequeña cuando mi padre jugaba al baloncesto y no recuerdo demasiado. A mí me tocó salir más bien por la rama artística aunque no sé muy bien de donde me ha salido. Soy un caso raro dentro de la familia. Quizá sea porque a mi madre siempre le ha gustado mucho escribir y era periodista. Componer canciones tiene que ver con escribir y quizá por ahí ubico más mi afición por la música y la composición.
-2018 fue el año de "Mont Ventoux", su primer y muy valorado trabajo, pero detrás se supone que hubo un esfuerzo enorme desde aquellos primeros pasos en el Torgal ourensano.
-Realmente 2018 lo destaco porque fue el año del primer disco, pero llevaba tocando bastante tiempo en bares. Empecé tocando en el Torgal de Ourense, que es un lugar al que estoy muy agradecida porque siempre me trataron genial allí y me apoyaron muchísimo. Luego vino el disco que fui presentando en salas y festivales. Estoy muy orgullosa de cómo están saliendo las cosas y de cómo me está yendo todo ahora que me estoy centrando al cien por cien mi carrera.
-Y el año pasado colaboración con Natalia Lacunza y lanzamiento de otro single. Además con exploración en otros sonidos diferentes a los del primer trabajo.
-Siempre me apetece explorar otros sonidos. Lo que me interesa es ver como los artistas se reinventan y son capaces de plasmar en sus creaciones diferentes momentos personales. Son personas que viven experiencias y cambios en su música y lo plasman. Esa es mi intención con las nuevas canciones. Mostrar mis momentos sin ningún tipo de prejuicio, pero también sin perder mi raíz y mi personalidad. Consiste en buscar en tus adentros y hacer aflorar en tu voz y en tu guitarra los sentimientos. Y aunque a veces sea un poco complicado, al final es eso. Demostrar tu capacidad para mostrar tu sensibilidad a través de la música.
