Francisco Javier Brea, de Viajes Barraña, sostiene que los disturbios en los centros neurálgicos del transporte en Cataluña también están afectando gravemente a profesionales que habían viajado a esta comunidad autónoma por cuestiones de trabajo. "La compañía Vueling tiene su base de operaciones en Barcelona, y la situación en Cataluña ya ha provocado que alguna gente que estaba allí perdiese los vuelos de regreso a Galicia".

Francisco Javier Brea, que tiene su agencia también en Vilagarcía, señala que la reciente crisis social en Cataluña no afecta demasiado a los viajes vacacionales, "porque en invierno no es un destino demandado a nivel nacional". Pero sí está perjudicando numerosos viajes de profesionales, a usuarios que se desplazan a otras capitales europeas pero que tienen que hacer escala en Barcelona, e incluso, "a gente que viaja por una consulta médica".

Además, muchos de estos usuarios se sienten desamparados, pues las compañías apelan a razones de fuerza mayor para eludir las eventuales indemnizaciones. "A los afectados les cambian los billetes y les ofrecen alternativas para el día siguiente. También les han ofrecido el reembolso del dinero del billete, pero ninguna de esas opciones compensa".

En lo que atañe a los viajes del Imserso, Brea señala que, en efecto la demanda se ha congelado de repente. "Cataluña es el único destino para el que quedan plazas", y añade que, "tengo gente en lista de espera que ha dicho que quiere ir a cualquier sitio, menos a Cataluña".

Así las cosas, los altercados parecen haber llegado en el peor momento posible para el sector hotelero catalán.

Varias agencias de viajes de la comarca de Arousa vivieron ayer una jornada frenética. Fue el caso de "B The Travel Brand" (en la foto), ubicada en Arapiles, una bocacalle de los jardines de Ravella, en pleno centro de Vilagarcía.

A las diez de la mañana la cola de clientes llegaba a la calle. Todos ellos eran jubilados que buscaban concertar alguno de los viajes ofertados por el Imserso. Y es que se establecieron dos días (16 y 17 de octubre) para solicitar las plazas, por tanto ayer era el último día. "Estamos aquí esperando y ni siquiera sabremos si nos quedará algo", comentaba un matrimonio procedente del municipio de Cuntis que ya había viajado en anteriores ocasiones con el Imserso.

Otro usuario que estaba en la cola confesaba estar interesado en disfrutar de las Islas Canarias, cuyo viaje puede conseguirse por 300 euros por persona durante ocho días (todo incluido). "En la península sale más barato, pero yo casi siempre busco islas; ya fui a Lanzarote y ahora quería ir a Tenerife", dice el jubilado a las puertas de la agencia vilagarciana.