En A Illa prácticamente todas las familias cuentan con algún miembro que ha trabajado en una fábrica de conserva, especialmente, mujeres. Esa era la actividad que, a principios del pasado siglo desarrollaban en las siete fábricas que llegó a tener el municipio. Pese a ello, son muy pocos los niños que conocen como era ese trabajo, en ocasiones muy duro, más allá de algún comentario escuchado en su casa a las abuelas.

Sin embargo, un proyecto de realidad aumentada que ha desarrollado el Concello de A Illa, financiado por los GALP de la ría de Arousa permite descubrir como era ese trabajo. Eso fue lo que comprobaron el lunes y ayer los sesenta niños que integran la ludoteca de A Illa.

Todos ellos pudieron enfundarse las gafas en 3D que se encuentran en la antigua fábrica de Goday, convertida hoy en Centro de Interpretación de la Conserva y ver como se elaboraban las conservas de pescados y mariscos. Incluso alguno de ellos llegó a reconocer a sus antepasados gracias a esas imágenes. La visita forma parte de las actividades que está desarrollando la ludoteca, que se centra, sobre todo, en que los pequeños conozcan en profundidad el medio en el que viven.

La próxima actividad que se va a desarrollar en la ludoteca se centrará en los animales, y para ello contarán con la colaboración del Refugio de Animales de Cambados, que acudirá con varios de sus perros para explicar a los pequeños el trabajo que realizan.

Las gafas de realidad aumentada del Centro de Interpretación de la Conserva forman parte del proyecto "Unha ollada cara o mar", con el que A Illa se presentó en la Feria Internacional de Turismo (Fitur) de Madrid. A través de esos lentes virtuales se ven una serie de hologramas que representan lo que era una jornada de trabajo normal en la fábrica, todo ello, de forma muy ajustada a la realidad. Las imágenes van acompañadas de una voz muy conocida, la del artista Carlos Blanco, y han sido elaboradas por la empresa Imaxina Novas Tecnoloxías de O Grove.