La Festa do Tinto de Barrantes, en Ribadumia, ha sido la primera de muchas en las que se podrá encontrar el Punto Morado, un lugar diseñado para ayudar y respaldar a las víctimas de abusos sexuales durante este tipo de eventos. En los tres días en los que el Punto Morado estuvo trabajando en la fiesta, con la ayuda de voluntarios, solo tuvieron que intervenir en una ocasión, durante la noche del viernes, cuando se les alertó de que una joven, muy afectada por el consumo de alcohol, se encontraba siendo presionada por otros tres jóvenes. Los voluntarios ayudaron a la joven y se pusieron en contacto con su familia que vino a recogerla.
El resto de las fiestas no se detectó ningún tipo de incidencia en ese aspecto, aunque sí se estuvo facilitando información a todas las jóvenes que se acercaron hasta la caravana en la que se encontraban los voluntarios.
El tinto es solo uno de los lugares que va a recorrer durante todo el verano. Al igual que el pasado año, este punto estará en la Festa do Albariño de Cambados, donde el pasado año hizo una importante labor, sobre todo, ayudando a una joven que había sido acosada durante la fiesta. Pero el funcionamiento del Punto Morado, explica su responsable, Mónica Novás, no se va a limitar solo a la comarca de O Salnés, sino que tiene previsto desplazarse por Galicia, e incluso, viajar a fiestas en otros puntos de la geografía española. De hecho, Novás se encuentra en contacto con diferentes estamentos para colaborar en denunciar las situaciones de acoso o abuso sexual que muchas mujeres sufren durante las fiestas multitudinarias.
