Un operativo de lucha contra el furtivismo en la pesca fluvial con artes prohibidas llevado a cabo por agentes facultativos medioambientales de la Xunta de Galicia, logró decomisar más de 130 nasas en las proximidades de la isla de Cortegada.

La intervención, que llevó casi doce horas, se efectuó dentro del límite fluvial del río Ulla, en una zona limítrofe con el mar que también se sitúa en el ámbito de afección del Parque Nacional Illas Atlánticas de Galicia.

La pesca en este espacio está regulada por el plan de aprovechamiento específico de la angula en la desembocadura del río Ulla para el año 2019, que se aprobó el pasado mes de enero mediante resolución de la Xefatura Territorial de Medio Ambiente de Pontevedra.

En el operativo, en el que participaron cuatro agentes facultativos medioambientales y cinco vigilantes de recursos naturales, se determinó que las más de 130 nasas, de diversas formas y tamaños, pertenecían a tres embarcaciones distintas. Las tres fueron identificadas y denunciadas, o lo que dio pie al inicio de expedientes sancionadores. Las investigaciones tratan de identificar también la propiedad de otras dos nasas que no contaban con boya identificativa.

En la localización y el decomiso de las nasas se utilizó una zodiac del Servicio de Conservación da Natureza de Pontevedra. En ella se embarcaron dos agentes facultativos medioambientales y un vigilante de recursos naturales. Realizaron varios viajes a tierra hasta conseguir retirar todos los aparejos. Los demás integrantes del operativo se encargaron de trasladar las nasas a una dependencia oficial de la Xunta de Galicia.

La Asociación Profesional de Axentes Forestais e Facultativos Medioambientais de Galicia, Aprafoga, valora como muy positiva la difusión de este tipo de intervenciones relacionadas con las funciones de la policía medioambiental, por cuanto pueden tener un efecto disuasorio contra el furtivismo, además de servir de información y concienciación al conjunto de la sociedad.