La segunda fase de regeneración urbana de Matosinhos y su entorno se pone en marcha, apenas tres semanas después de abrirse al público la primera fase de este proyecto. Los operarios de la empresa adjudicataria inician este lunes las actuaciones destinadas a remodelar por completo la imagen y servicios y mejorarán la accesibilidad de esta céntrica y poblada zona de Vilagarcía de Arousa. El Concello invierte 338.355 euros en esta segunda fase, que tiene un plazo de ejecución de seis meses.

Tras los trabajos ejecutados en el acceso a la Escola Infantil Municipal y en las calles del perímetro, las obras de la segunda fase se centrarán en un primer momento en la avenida Doutor Tourón para dar continuidad y finalizar la reforma de la acera, siguiendo los criterios estéticos y funcionales del tramo ejecutado. La intervención finalizará en la intersección con la Rúa Xunqueira, donde también se actuará para acondicionar la zona de aparcamiento que existe detrás de la escuela infantil y mejorar su estética.

El proyecto también prevé una intervención en la acera opuesta de Doutor Tourón, en concreto en la zona de la parada de autobuses situado frente a las torres Caixanova, que se acondicionará creando una zona verde.

Por último, se actuará en el corazón de Matosinhos, en la zona verde. La actuación en el parque prevé cambiar por completo la estética de esta zona, con un diseño que combinará áreas de césped con otras en las que se plantarán árboles y arbusto y se instalará iluminación led en los alcorques. La conexión del parque con la calle Matosinhos se mejorará con el acondicionamiento de los corredores existentes entre los edificios, en los que se eliminarán las barreras arquitectónicas.

Con la realización de estas dos fases, el Concello de Vilagarcía de Arousa invierte en la modernización y mejora del barrio de Matosinhos más de medio millón de euros. Para el gobierno local, actuar en esta zona es fundamental debido a que no se realizaron obras importantes desde hace casi tres décadas y, principalmente, porque se trata de una zona altamente transitada a pie por niños que acuden diariamente a los cuatro centros educativos allí emplazados, por lo que era urgente mejorar la seguridad y accesibilidad.