El empuje mostrado por trabajadores y familiares de la residencia "Valle-Inclán" de Vilanova de Arousa ha encontrado recompensa ya que se reunirán mañana con responsables de Política Social para abordar una solución al decreto de cierre que pende sobre las instalaciones. Conseguir este encuentro no ha resultado precisamente sencillo para el grupo, sobre todo porque han tenido que recurrir a la presentación de más de 7.000 firmas de toda la comarca de O Salnés, además de contar con el apoyo de Gañemos Vilanova y del grupo parlamentario de En Marea, que presionaron a la administración autonómica para conseguir este encuentro.
La intención de los trabajadores y de los familiares de residentes es evitar que las dependencias de As Sinas cierren sus puertas, dejando a más de un centenar de personas mayores y a 52 trabajadores en la calle, cifras importantes pese a no estar funcionando al límite de su capacidad debido a los problemas que tiene con la Xunta. Para evitarlo cuentan con una propuesta que la formación En Marea presentó en el Parlamento de Galicia y que contó con el respaldo de todas las formaciones políticas.
En esa reunión, los trabajadores plantearán que se busque una situación a los problemas administrativos que tienen las empresas que gestionan el inmueble, ya que ninguna está incluida dentro del catálogo que autoriza a realizar este tipo de servicios.
El conflicto de la residencia "Valle-Inclán" se arrastra desde hace años, pero en los últimos meses se ha intensificado ante el ultimátum de la Xunta en la que decretaba el cierre de las instalaciones. De hecho, se llegó a informar a las familias de la existencia de plazas en otras residencias de Galicia, sobre todo en Monforte, O Barco y otros puntos muy alejados de Vilanova. La comunidad de la residencia vilanovesa forzó un pleno en el mes de noviembre en el que se instó a la Xunta a recibirlos aunque no fue hasta la entrega de las firmas y de la intervención de En Marea en el Parlamento cuando se cerró el encuentro.
