El sindicato CIG reunió ayer en su sede de Vilagarcía de Arousa algo más de medio centenar de delegados sindicales que, tras celebrar una asamblea informativa sobre la necesidad de demandar pensiones públicas dignas, salieron en manifestación por la zona céntrica de la ciudad hasta la sede del Instituto Nacional de la Seguridad Social, INSS, donde desplegaron una pancarta y se concentraron durante más de media hora.
Para facilitar el paso de los manifestantes, los efectivos de la Policía Local procedieron al corte de varias calles del entorno de San Roque a media mañana, produciéndose algunas retenciones de vehículos.
"Los delegados de CIG en todas las comarcas salimos a la calle para reivindicar pensiones públicas dignas. En primer término, para que a los actuales pensionistas se le garantice el cobro de su jubilación y que su revalorización esté ligada al incremento del IPC, y que no quede a merced del gobierno de turno como hasta ahora", destacó este mediodía el sindicalista Xoán Xosé Bouzas.
Por otro lado, CIG denuncia el acuerdo alcanzado por CC.OO y UGT con el Gobierno sobre la modificación de la jubilación parcial, por entender que es totalmente arbitrario, antidemocrático y anti clase trabajadora.
"Este acuerdo diferencia unos colectivos de otros, es decir, aquellas personas que trabajan en empresas manufactureras sí pueden acogerse a la jubilación parcial, aunque con condiciones inferiores a las que había hasta el 31 de diciembre de 2018, pero el resto de los trabajadores resulta discriminado y no puede beneficiarse de esa posibilidad. Nosotros entendemos que la jubilación parcial viene derivada de la reforma laboral que había que derogar, y si no se hace ahora vienen estos problemas", explicó el máximo responsable de la agrupación sindical en Arousa, Xoán Xosé Bouzas.
El sindicalista de CIG añadió que entre los más desfavorecidos por las diferencias aplicadas en la reforma de la jubilación parcial están las mujeres que mayoritariamente trabajan en sectores como la conserva, la hostelería, la limpieza o la seguridad. Aquí también se produce una discriminación más entre hombres y mujeres. Esta es una de las reivindicaciones que la Intersindical Galega va a llevar a la huelga que convocará para el 8 de marzo.
"Esta movilización que hoy estamos haciendo ante la delegación del Instituto Nacional de la Seguridad Social en Vilagarcía va a continuar en el futuro con una movilización a nivel nacional que será el próximo 26 de enero en Santiago de Compostela, por lo que hacemos un llamamiento a la participación porque el gobierno del PSOE en el Estado creó muchas expectativas entre los trabajadores, y no las está cumpliendo, pero además está agravando más las medidas que hizo el Partido Popular. Deben tomarse de una vez medidas progresistas a favor de los trabajadores y no para beneficiar a la banca y al gran capital", puso de manifiesto Bouzas.
El sindicalista explicó que el día 26 CIG va a facilitar autobuses para el traslado de la gente a la manifestación de Santiago. Los transportes saldrán a las 10 de la mañana desde O Grove; a las 10.30 horas desde Cambados y a las 11 horas desde Vilagarcía de Arousa.
"Pedimos a toda la gente que quiera asistir que se anote antes en la sede del sindicato para reservar la plaza en los autobuses porque no queremos tener problemas ni por exceso ni por defecto, y que todos los que estén interesadas tendrán a su disposición el transporte gratuito", añadió.
