La tromba de agua caída de noche y a primeras horas de la mañana de ayer en la comarca de O Salnés tuvo grave incidencia en el municipio de Vilagarcía de Arousa. Calles cortadas al tráfico durante casi una hora, vehículos atrapados que acabaron en el taller, un árbol caído en el río de O Con, el desprendimiento de un tendido de servicios en una de las calles del barrio de Os Duráns, se contabilizaron entre los problemas principales. Pero la peor situación se vivió en el centro de salud de A Illa de Arousa, cuya cubierta no resistió y filtró agua, anegando consultas y locales. Trabajadores y usuarios convivieron con la inundación durante la mañana.

El personal del centro de salud de A Illa de Arousa se encontró con un panorama desolador al llegar a su puesto de trabajo a primera hora de la mañana, ya que una capa de agua de dos centímetros (en algunos sitios más) cubría todas las estancias. El sonido de una alarma en la zona de las obras de ampliación ya auguraba una mala situación en estas instalaciones.

Además ayer era día de extracciones y la consulta donde se realizan, así como el pasillo central resultaron los más afectados.

La zona nueva, objeto de las obras de remodelación y ampliación del centro de salud, también quedaron encharcadas. De hecho, estaba prevista su inauguración en dos semanas pero ahora, como mínimo, tendrán que cambiar todo el pladur que se empapó.

El personal del centro de salud y los usuarios tuvieron que convivir con los charcos de agua hasta que los operarios de la empresa de limpieza llegaron al edificio y aspiraron el líquido y retiraron los papeles que se habían puesto en el suelo para tratar de absorber lo máximo posible.

Fuentes de Mantenimiento de la EOXI de Pontevedra-O Salnés rechazaron que hubiera inundación masiva en el centro de salud de A Illa de. Según explicaron, tan solo tuvieron que "llamar a la empresa de limpieza para extraer el agua que entró y afectó básicamente a la consulta de extracciones y al pasillo central y filtró a la zona de obra, pero sin afectación con la ejecución de la obra de reforma y ampliación actual".

Según señalaron los técnicos de mantenimiento del Sergas, el agua de lluvia entró por un canalón del tejado. Estas mismas fuentes indican que, en la zona de O Salnés, la inclemencia meteorológica de estas últimas horas tan solo afectó poco tiempo al centro de salud de Paradela-Meis, por una avería en el suministro eléctrico de Fenosa.

En Vilagarcía la tromba de agua se hizo notar especialmente a partir de las seis de la mañana. A esa hora quedaban cortadas al tráfico las avenidas de Rosalía de Castro y López Ballesteros (en el puente hacia el barrio de A Torre). En la principal arteria que une Vilagarcía y Carril quedaron atrapados tres coches que pudieron ser auxiliados por efectivos de Emergencias. Finalmente fueron retirados por la grúa y dos de ellos se llevaron directamente al taller.

Pero también hubo inundaciones en la avenida de Valle Inclán e importantes bolsas de agua en O Preguntoiro (Vilaxoán), avenida de Juan Carlos I y calle Colón.

Durante toda la mañana trabajaron tres dotaciones del servicio municipal de Emergencias y Protección Civil de Vilagarcía y, en los momentos más críticos de las inundaciones se vieron obligados a movilizar una autobomba rural que es más alta que el resto de los vehículos de su parque móvil.

Sobre las 9 de la mañana, vecinos y usuarios del barrio de San Roque, junto a la rotonda de Luz Salgada, advertían de la existencia de una arqueta que había desbordado y de la peligrosidad de las aceras y calzada que estaban muy resbaladizas. La zona está muy próxima al centro de salud de San Roque, por la que pasa mucha gente durante la mañana. De hecho, a causa de las tareas de limpieza de este tramo, hubo retenciones de tráfico con vehículos en caravana desde el tanatorio de Rubiáns.

También en la calle Pascual Veiga, en Os Duráns, cayó un cable y dejó cortado el vial durante la mañana. En el paseo del río de O Con, un árbol se precipitó al cauce fluvial por la acción del viento y de la lluvia.